La foto es de enero de 2015, como prueba el artículo que publiqué en eldiario.es. De Madrid, regido por Ana Botella. En Madrid esta privatizada la recogida de basura y los distintos tipos de residuos sólidos urbanos en dos lotes (centro y periferia) desde Noviembre de 2014, la limpieza viaria y jardinería y otros menesteres esta privatizada en 6 lotes desde 2013. Todo bajo mandato de Ana Botella, tras sustiuir al alcalde electo Alberto Ruiz Gallardón. Con él habrían comenzado los recortes y los problemas.
La capital de España sigue estando sucia. La actual corporación decidió prorrogar hasta octubre de 2016, un año, los contratos suscritos por el PP en tanto estudiaba incluso la remunicipalización del servicio.
La Recogida de Residuos Sólidos Urbanos (o basura) de Madrid sigue por tanto en manos de FCC, Fomento de Construcciones y Contratas, la constructora que dirige actualmente Esther Alcocer Koplowitz y que se ocupa fundamentalmente del centro. Y, para los distritos, la unión de Ferrovial y Urbaser. Ferrovial, otra multinacional de la construcción y servicios, está a cargo de Rafael del Pino Calvo-Sotelo, hijo del fundador Rafael del Pino. Urbaser hunde sus raíces en OCISA, fundada en 1942, que agrupó a todas las empresas de los Bancos Hispano Americano y Urquijo, y tras numerosas incorporaciones forma parte del boyante grup ACS que preside Florentino Pérez. Todas estas gentes tan importantes son las que han de limpiar el municipio de Madrid, según el contrato que les fue adjudicado.
El diario ABC se muestra muy preocupado por la suciedad de Madrid, con toda razón. Está tan sucia como con Ana Botella, más o menos. En 2014, cuando entraron Del Pino y Florentino Pérez, en cambio, escribía exultante:
La competencia ha llegado, de este modo, a la recogida de residuos en la ciudad. Durante un año largo, ambas concesionarias -Urbaser en la periferia y FCC en los distritos del centro- convivirán prestando el mismo servicio, con la vista puesta en el nuevo contrato, el «gran pastel»: a partir del 1 de enero de 2016, toda la recogida de basura en la ciudad tendrá que salir a concurso, al vencerse las dos adjudicaciones ahora en vigor. Será el nuevo gobierno municipal que salga de las urnas en mayo de 2015 el que decida si se oferta el servicio en toda la ciudad, o si ésta se divide en zonas y se saca la actividad en varios concursos diferentes.
Las cifras del negocio no son ninguna minucia: el contrato de los distritos de la periferia por trece meses supondrá cobrar algo más de 80 millones de euros. Las cifras de todo Madrid, en una adjudicación que será por al menos ocho años, puede fácilmente superar los mil millones de euros. Eso explica que también haya habido sus «roces»: a 48 horas del inicio del funcionamiento del nuevo contrato, la concesionaria «histórica» presentó un recurso contra la adjudicación, que planteaba dejarla en suspenso hasta que los tribunales dirimieran sobre el asunto.
Ese “bocado” tan jugoso es lo que obliga a pensar muy bien qué se hace con el servicio. El «negocio» habría de ser preterido en favor de los ciudadanos.
Madrid vivió una huelga de limpieza viaria y jardinería basuras en 2013 -que parece haber sido olvidada- por el recorte decretado por Botella del 26% del dinero destinado a limpieza y jardines ( 1.943 millones). Las contratas, con menor presupuesto, pretendían también despedir a casi 1.400 trabajadores. El paro, sin fisuras, logró que se respetaran buena parte de esos empleos, pero perdiendo derechos laborales. El cuidado de los jardines y árboles sufrió, igualmente, desde entonces un grave deterioro por la reducción de personal. Los barrenderos sufrieron su calvario, perdidos en el olvido mediático.
Ana Botella ya lo dijo: “los madrileños se han acostumbrado a un nivel de limpieza muy alto”. Por eso, probablemente no siguieron votando mayoritariamente al PP. Pero sus lodos quedan.
Ahora bien, es imprescindible solucionar el problema.
Y son muchas las basuras esparcidas por todo el territorio nacional, y en múltiples sectores, que también habrá que limpiar.
- He incorporado datos que aporta Luis en el comentario nº 3 y que os recomiendo leer, dado que todo él contiene información interesante. Seguí con atención aquél desmantelamiento llevado a cabo por Ana Botella y el calvario al que sometió a los trabajadores del sector, Luis me ha ayudado a recordar algunos detalles esenciales. Muchas gracias.