Lo siento mucho, no lo volveré a hacer. O sí

Diez años después del estallido formal de la crisis financiera internacional nos encontramos con otra aún más preocupante, si cabía. El FMI confiesa –ellos dicen alerta – una deuda global récord, un 60% mayor que en 2007 en los movimientos previos que precedieron al derrumbe financiero. Son 182 billones de dólares, 156 veces el PIB español, y creciendo vigoroso al ritmo de 18 billones de dólares desde la primavera.

Una sociedad aturdida y crispada atiende los cantos de sirena de quienes causaron la crisis y borran su memoria, reforzados ahora por una deriva ultraderechista que recorta libertades y democracia como absurda panacea. Diez años después de la llamada crisis hay más desigualdad, más precariedad en los más débiles, y la sombra del fascismo empieza a nublar el cielo por su tamaño.

Atribuye el FMI la causa central al proteccionismo estadounidense que aboca a una guerra comercial. Los más perjudicados son la UE y los países emergentes. Solo que olvida decir que Trump es hijo de sus salidas a la crisis de 2008 y que la UE sufre las secuelas del errático tratamiento que aplicaron. Mejor dicho, errático no, sabían perfectamente lo que hacían.

Grecia es el símbolo y la víctima. Tenemos un país al que los gobiernos conservadores y socialistas, de Nueva Democracia y PASOK, han dejado en bancarrota. La quiebra se produce con el gobierno de ND y tras falsear las cuentas en su día para entrar en el Euro con ayuda de Goldman Sachs. La empresa que empleó a Mario Dragui, el que ya es presidente del BCE, y forma la Troika, con el FMI, y el Consejo Europeo, los jefes de gobierno de la UE.

En un informe interno de hace algún tiempo,  el FMI reconocía que sacrificó a Grecia por presiones políticas para proteger a los bancos –principalmente franceses y alemanes – expuestos a la deuda griega. Estamos en 2010 cuando la tragedia empieza. Ocurrió en directo ante nuestros ojos y lo contamos, pero las presiones seguían desviando la atención. Fue la época en la que se echaban presidentes para poner empleados del poder financiero. El tiempo en el que se coaccionó a Grecia para que no eligiera un gobierno progresista. Cuando les hicieron comerse el «No» a un referéndum de consulta sobre las crueles condiciones del rescate.

Para entonces los gobiernos que, asustados, por el castillo de naipes  caído tras Lehman Brothers, habían prometido “refundar el capitalismo” se empleaban a fondo en refundar a los ciudadanos y que pagásemos sus facturas. Para entonces ya había habido un 15M  en España y una indignación extendida por muchos países. Para entonces ya había surgido Podemos y entrado en el Parlamento Europeo y amenazado la burbuja bipartidista. Los grandes medios luchaban en las filas del poder.

Prensa española de la época
Prensa española de la época

La Troika quería un castigo ejemplar. Grecia solo representaba el 2% del PIB de la UE pero nos hicieron creer que por ese agujero se iba Europa. No aceptaron las condiciones negociadoras del nuevo gobierno griego. Iñigo Sáenz de Ugarte hizo un trabajo ejemplar en donde se muestra hasta  cómo iban tachando con bolígrafo las propuestas griegas.  De ahí que salieran tan risueños de estas reuniones.

El Eurogrupo se ensañó con Grecia. Varoufakis, ministro de finanzas se fue, Tsipras acató. El FMI y el resto de la Troika convirtieron a Grecia en un protectorado que debía consultar hasta si compraba aspirinas.  Se atacó con prioridad lo que da lucro a la rapiña: las pensiones, la sanidad, los inmuebles, infraestructuras y bienes públicos. Y llega el dinero, y lo primero es pagar a la UE, y después a los bancos, siempre los bancos. Y no queda apenas nada para la gente.

El Eurogrupo con sus más destacados miembros: el alemán Schäubel y el holandés Dijsselbloem que ha revalidado su presidencia
El Eurogrupo con sus más destacados miembros: el alemán Schäubel y el holandés Dijsselbloem

Y casi no se han hecho las primeras anotaciones, de entra y sale,  en las cuentas del Estado cuando se aplican las exigencias de los rescates. Comienzan de inmediato las privatizaciones de los aeropuertos  –requeridas como condición del Eurogrupo – y los adquiere, oh, gran casualidad, el grupo alemán Fraport. Entre ellos los de las islas turísticas de Corfú, Mikonos o Santorini. El grupo  Fraport (Aeropuerto de Fráncfort),  tiene como accionista principal al estado de Hesse. Es solo un ejemplo de la subasta, despiece y liquidación de Grecia. No es la primera vez que se cambia deuda por territorio, pero cada vez chirría más en un siglo XXI.  El paisaje del hambre y la miseria se acrecentó . Los periodistas, grandes periodistas, Joaquín Estefanía y Ana Cañil, contaban en la presentación de su libro sobre la crisis griega que los amigos respondían de esta forma a la ritual pregunta de viaje: ¿Qué os llevamos? Y era comida y productos de primera necesidad.

Y va y dice el FMI algo así como “Lo siento mucho, no volverá a ocurrir”. O ni eso. Y lo grave es que volverá a ocurrir mientras la ciudadanía no reaccione. Que se diría estamos en puertas de que pase otra vez.

Porque volvemos a empezar. Nos alertan. Otra “crisis” de la Deuda. Mayor. Un 60% más. Es tan apetitosamente lucrativa. Tras Grecia cayeron también Irlanda y Portugal. Y se dio un ultimátum a España. Hasta  Obama llamó a Zapatero para que fuera buen chico y metiera la tijera. Rajoy, exultante, se alegraba de que España estuviera en el corredor de las crucifixiones culpando a Zapatero. Es un eterno Déjà vu. Elegido por mayoría absoluta, aplicaría una especie de rescate en diferido, gran parte del cual se ha dado por irrecuperable.

En agosto de 2011, cuando los mercados “castigan” sin cesar a Europa, nos encontramos con una brutal elevación de sus primas. Los bonos griegos se disparaban a 1.256 puntos con un rendimiento que llegaría al 18,50%. Ni en el casino. Los irlandeses y los portugueses alcanzan ya casi los 900 puntos, aportando ganancias del 11%. Los de España, con un 400, rentan un  6%.

La inconsciencia y la ignorancia compran. En la Italia de Salvini que detiene alcaldes progresistas. En la Europa que está reventando sus Constituciones. En la España que conspira desde la podredumbre de sus cloacas.

Polluelos piadores incasables de las falsas bondades de este capitalismo de Casino buscan clientela para las urnas. ¿No añoran ustedes al PP como dice Pablo Casado? ¿No sueñan con un gobierno presidido por Albert Rivera? ¿Y por el mentor de ambos el gallo guerrero que vende libros y su sistema? ¿Y con una bandera o dos que tapen todo?

De lo que no pueden albergar la mínima duda es de esta máxima que dicta la experiencia: esa deuda monumental de 182 billones de dólares que sube como un suflé nos la harán pagar a los ciudadanos. En dinero o en especie. Hasta en democracia. Y algunos se seguirán riendo.

 

La ejecución de Grecia: no es economía, es política

Esta ocurriendo ante nuestros ojos y no parece dársele la atención que merece: el ultracapitalismo que defiende ahora mismo la UE está ejecutando a Grecia y a los griegos para dar un escarmiento ejemplar a España e Italia por si pretenden escapar del yugo de la austeridad, sus beneficiarios y víctimas.  No es una cuestión económica, es política. Y se lleva a cabo en nuestros nombre.

Un nuevo y extraordinario trabajo de Íñigo Sáenz de Ugarte, Guerra Eterna, subdirector de eldiario.es, aporta numerosas claves: Es una Operación de castigo:

Un boligrafo con muy clara intencionalidad tacha las propuestas griegas

Un boligrafo con muy clara intencionalidad tacha las propuestas griegas

Los negociadores han rechazado punto por punto las propuestas del gobierno de Tsipras. En esta línea:

“Las instituciones [antes llamadas troika] han presentado una nueva propuesta que transfiere la carga [de la austeridad] sobre los asalariados y jubilados de una forma socialmente injusta, mientras al mismo tiempo evita aumentar la carga sobre los que más tienen”, dijo el comunicado de respuesta del Gobierno griego.

Y así es como demuestran los hechos y detalla Guerra Eterna:

Lo que vemos en esos cinco folios tachados es un rechazo completo de las propuestas de Tsipras. El Gobierno estaba dispuesto a obtener 7.900 millones de euros en dos años, pero en más de un 90% la diferencia procedía de aumento de ingresos vía impuestos. Pero el FMI exige dar la vuelta al cálculo. Quiere que los ingresos extra procedan en un 80% del recorte de gasto, y sólo el resto del aumento de impuestos. La negociación continúa en la noche del miércoles y continuará en la mañana del jueves.

Los folios tachados por la troika exigen que el “complemento de solidaridad” que reciben los jubilados más pobres queden eliminados a final de 2017. Tsipras proponía empezar a recortarlos a partir de 2018 y acabar con ellos en 2020. Y eso que Olivier Blanchard, del FMI, dijo hace unos días que los planes del Fondo suponían recortar el gasto en pensiones pero sin tocar a los pensionistas más pobres.

Lo que la troika propone es endurecer la austeridad para obtener a cambio los fondos que permitan a Grecia seguir pagando los intereses de una deuda insostenible.

Tras aportar muchos más datos y argumentos (recordemos que la quiebra de Grecia se produjo con el gobierno conservador de Nueva Democracia y tras el maquillaje -falseo- de cuentas de la Goldman Sachs de Dragui), Sáenz de Ugarte concluye con esta clave:

Al final, el problema de Grecia continúan siendo el mismo que había el primer día. No era el único país en una situación financiera desesperada por los problemas estructurales creados por la moneda única, además obviamente por sus propios errores. Otros países se encontraban en una situación similar y tenían el tamaño perfecto, es decir, no demasiado grande, como para gastar dinero en ellos para que siguieran pagando sus deudas. Sólo había dos que podían caer en la misma situación, pero que eran demasiado grandes como para ser digeridos, España e Italia. El principio (moral e ideológico, no económico) de que las deudas hay que pagarlas, aunque supongan una carga insostenible, obligaba a sostener a Grecia moribunda en la UVI, pero sin aplicar la cirugía habitual en la deuda en estos casos, la que el FMI siempre ha aplicado en Asia, África y Latinoamérica, para impedir que España o Italia abandonaran sus habitaciones de planta.

Una reestructuración de la deuda griega sería ahora un ejemplo terrible para cualquier otro país europeo, para sus habitantes, porque se da la molesta circunstancia de que esos estados son democracias en las que los ciudadanos pueden exigir en las urnas soluciones diferentes a las impuestas desde Bruselas.

Múltiples datos cruzan hoy España. El brutal ataque del PP a la educación con la elevación de tasas que contabiliza ya 86.000 alumnos menos en solo tres años. Un gobierno volcado en privatizar la sanidad pública a base de entregarle millones. ¿Todavías hay algún incauto que crea que las empresas de sanidad privada son ONGs y que su fin prioritario no es la búsqueda de beneficio económico y que de algun lado sale? Perfectamente admisible como opción, mientras no lo subvencionemos y quitándolo de la pública.

Y por si faltara un detalle en la ecuación, Linde, el gobernador del Banco de España, avisa otra vez que el tajo a las pensiones es un hecho, que se acabó  revertir en los ancianos dinero que puede mplearse en otra cosa más lucrativa para algunos. Al ultracapitalismo le gusta mucho ese bocado. Ahorre Vd para la vejez con 1.200 euros brutos de sueldo -es el salario mayoritario en España- o estando en el paro.

Los correligionarios del PP y el PSOE (Nueva Democracia y PASOK), causantes de la bancarrota, tragaron. Syriza sigue batallando contra una pétrea ideología que no ha hecho otra cosa que aumentar las desigualdades. España en cabeza con su liderazgo en el incremento de multimillonarios que son para quienes trabajan.

Con malnacidos varios que se apuntan a defenderlos y masacrar a los griegos solo porque gobierna Syriza y por mantender su plato de lentejas, es nuestra sociedad la que también está en el tablero. ¿Les han explicado a los partidarios del «hay que pagar lo que se debe y como los señores gusten mandar» que Rajoy nos ha metido en un billón de euros de Deuda Pública tras un aumento histórico y nada casual? Que vayan ahorrando.

«¿Promesas que no se pueden cumplir?»¿por qué no habla esta paniaguada mediática, una más de las que trabajan por el sistema viciado, del bolígrafo de la UE y Lagarde?

De cualquier forma, la ética que se definió precisamente en Grecia, no permite a ningún demócrata alentar este atropello evidente que se está perpetrando con grecia. Los datos hablan. Las trampas también. No es economía, es política. Contra los ciudadanos.

Por cierto, Rajoy y De Guindos, con su largo historial en la materia, también están con la pala, aguardando la muerte de una Grecia que quiso luchar por sus ciudadanos y que aún respira.

grecia.merkel.lagarde

El FMI pide más recortes pero no para el registrador amigo de Rajoy

España -por lo que oigo y leo en la prensa oficial- va de maravilla. Rajoy dice incluso que somos el ejemplo del mundo. Solo hay algún problemilla. Según el FMI, España cerrará 2014 con el mayor déficit de la zona euro: el 5,9%. De la deuda no hablamos, no hablan tampoco los expertos del Fondo porque es dinero que se debe a los amigos y están que se frotan las manos con la descomunal subida que ha propiciado Rajoy.

En fin, que también es casualidad que con lo bien que lo hace el PP y los palos que ha dado al bienestar de los ciudadanos para «arreglar la crisis», incumpla el déficit de esa manera. El FMI pide por tanto que se recorte -más- el gasto social (léase inversión social). Que menos sanidad pública, menos educación pública,  alargar la edad de jubilación para pagar menos a los pensionistas y desde luego reducir el sueldo de los funcionarios. Se dedican al sector público y ya no se van ni a necesitar. El que quiera educarse, o tratar sus dolencias que se lo pague o que se muera.

Eso sí, hay que ser generoso con los bancos. Aún no están bien «saneados» a pesar de las ingentes cantidades de dinero público que les hemos entregado. Pero necesitamos seguir regándoles con nuestros derechos, con lo poco que está quedando de ellos,  porque así igual dentro de dos años se reactiva el crédito. El paro no se va a arreglar -ya lo han advertido- pero las cifras macroeconómicas mejorarán. Comeremos balances contables, y nos curaremos con la balanza de exportaciones o algo así. Ah, y Rosell de la CEOE ha declarado que, vale, que ya pronto se crearán puestos de trabajo -es mentira- pero que necesitan salarios variables. Trabajar a destajo. Hoy te pago 5, mañana 3, y tú nada, créate una vida así. La CEOE, también la tenemos bien atendida, ved.

Lo hermoso de este panorama es que, por ejemplo, Rajoy le ha apañado a un colega un puesto en la SAREB, en el banco malo. Vamos al que ocupó su plaza de registrador -esa que no cuenta si le da o no beneficios porque no les sale de los cataplines-, como interino. Repito, al que le sustituyó de forma interina mientras él se dedica a la sagrada misión de velar por los intereses de los ciudadanos desde la política -si es eso lo que hace-. Esto sí lo ha confirmado. Se lo preguntó Gaspar Llamazares de Izquierda Unida que algo debía saber, y el gobierno ha dicho que sí. Que el interino que le guarda la plaza es consejero de la SAREB. Y ya sé que el FMI no se mete en estas cosas pero tiene triste gracia que no diga mi mú por lo menos. Que le recorten algo el sueldazo, o las dietas.  Aunque en estricta justicia a quien tenían que recortarle los emolumentos, dejar a cero por abandono del cargo, es al Rajoy que se ha atrevido a tamaña desvergüenza.

En Gran Bretaña la ministra de cultura ha tenido que dimitir debido a fuertes presiones. Resulta que no ha podido justificar un gasto parlamentario de 7.000 euros.  Allí hay democracia y sobre todo ciudadanos, con sentido cívico, honestos como sociedad.

Aquí ¿qué hay? ¿Qué tipo de gente se calla ante lo que nos está pasando, ante lo que nos están haciendo?

 

Justo reparto de cargas: más pobreza para la mayoría, más riqueza para los ricos

Soy consciente de que exigimos sacrificios a los ciudadanos, pero somos cuidadosos de repartir las cargas de forma justa«, dice Rajoy al diario austriaco Kurier, practicando su nueva afición de mostrar sus creativas versiones de la realidad a medios extranjeros. El presidente dispone de contundentes datos que avalan su tesis: bajo su égida, ha aumentado en España el número de millonarios y el de pobres. Irrefutable desigualdad en el pago de la crisis… si fuera eso a lo que se refiere, porque pudiera estar hablando de otra cosa.

47.000 personas han pasado a engrosar en España durante el último año el selecto grupo de los millonarios. De los de verdad, de los que tienen como mínimo un millón de dólares de patrimonio. No falta ni uno de los habituales, así que ya sumamos 402.000 individuos a quienes les desborda el dinero hasta por las costuras de sus trajes. Décima potencia mundial España en millonarios y multimillonarios, el crecimiento de este sector durante 2012 ha sido espectacular, aupándose al octavo puesto entre los que han registrado el mayor aumento. La política del PP les ha ido como Dios, si se me permite la expresión. Las políticas neoliberales y la propia crisis, bien es verdad. Desde 2007 los adinerados hasta la obscenidad van en ascenso libre en todo el mundo, con unas pocas excepciones.

Como suele pasar, en España el número de millonarios crece con el mismo vigor que el de los afectados por la pobreza severa: vivir con menos de 307 euros al mes (calderilla para el grupo anterior). Ya son 3 millones de personas. Y ya la pobreza aguda afecta a un 26,7% de los niños, tras aumentar el triple que en la UE. En Cáritas, autores del informe que lo evidencia, mostraron alarma porque las medidas adoptadas han acarreado “el abandono, injusticia y desposesión de los derechos más básicos de las personas”. La “cargas” a los más vulnerables han sido de profundidad y ancha amplitud.

El Consejo de Europa (nada que ver con el Consejo Europeo, el gobierno de la UE) incide en la misma cuestión porque son hechos incontestables. Advierte que los recortes practicados por el PP –atentos a la frase- “degradan los derechos humanos”. También llama la atención sobre el aumento de la violencia policial contra las manifestaciones de protesta. El gobierno recibe a palos ese derecho democrático, dibujando un panorama bien explícito.

Como será de famosa la afilada tijera del PP que hasta el FMI ha entrado a valorarla advirtiendo que tanto tajo a la sanidad va a resultar a la larga “más caro”. El dolor que los recortes están infiriendo a los españoles no, el costo. Que por ahorrar en unas mamografías luego se tenga que pagar el tratamiento de un cáncer, por poner un ejemplo, y ni siquiera sea rentable obligar a los enfermos a cotizar por sus medicinas. Y es que aunque se les abandone a su suerte y se pudran, algún gasto harán que se podía haber evitado.

Y eso que todavía no se ha evaluado cómo afectará la merma del poder adquisitivo de las pensiones. Con ella y los repagos y las alzas de precio de todo, y el paro y la bajada de salarios, se está pinchando el “tradicional” -y tan amado por los partidarios de ahondar en la desigualdad social- “colchón familiar”. Ya no tendremos ni dónde caernos muertos tras las próximas “cargas”.

Un tercio de quienes mueran lo harán con dolor intenso, decían este fin de semana los especialistas en cuidados paliativos. También ha “ahorrado” el gobierno en eso. Y en el CNIO para la investigación del cáncer. Y en todo tipo de investigación. No cabe pues, “cargar” más sobre la mayoría de la población. ¿Y sobre los más ricos qué ha caído? Millones en tropel como si se hubiera desparramado sobre ellos el cuerno de la abundancia. Qué casualidad. ¿Se han vuelto de repente mucho más listos y emprendedores? Será eso y no la evidencia palmaria de para quién y contra quien viene gobernando el PP.

No sabemos verlo, pero las palabras de ese genio del género fantástico que es el presidente del gobierno español suelen traer mensajes subliminales. Cuando habla de un reparto justo o equilibrado de cargas no se refiere a lo que los ingenuos ven a primera vista. Él habla como lo haría un experto… en demoliciones. Su misión es abatir el Estado del Bienestar y la sociedad tal cómo la conocimos en las últimas décadas. Y en eso es una primera figura. Su equipo –de políticos y medios de comunicación- utiliza los nuevos métodos: cizallas hidráulicas rotacionales y machacadoras de piedras silenciosas junto a las tradicionales excavadoras para cortar o atravesar madera, acero y hormigón. Para que los más fieles o escasamente pensantes no adviertan sino “reformas”. Pero, como allanado el camino apenas resta ya el paseo triunfal, el objetivo se ha vuelto urgente, por pura satisfacción propia. Rajoy parece querer advertir que ya ha dispuesto lascargas finales en los cimientos y puntos estratégicos para que el edificio implosione y se vaya al cuerno en segundos. Lo que queda de él. Es importante la precisión en la técnica porque se trata de preservar todo lo que queda fuera del perímetro a derruir. Es bien evidente qué y quiénes en este caso.

Disciplinadas hormigas zombies acuden, por millones, a llevar los explosivos para ayudarle en la tarea.

*Publicado en eldiario.es

¿Tú también eres un insoportable «riesgo financiero»?

El FMI ha mejorado en dos décimas sus previsiones de recesión para España. No de crecimiento, de recesión. En lugar de caer en 2013 un 1,5%, será “solo” un 1,3%. En 2014 las cosas, dice, irán algo mejor. No el paro que seguirá en el 25% hasta 2018 (el histórico 20N de 2011 no llegaba al 23%). Ni el consumo, ni el crédito. Por tanto, continúa también la “necesidad” de seguir haciendo muchos más ajustes. España precisa bajar aún más los sueldos. Para competir con los trabajadores asiáticos. Las pensiones tampoco nos las podemos permitir. Ni nosotros ni nadie ya. Nada ha contradicho, sino todo lo contrario, aquel informe del año pasado en el que el FMI argumentaba detalladamente, y sin el menor disimulo, que la longevidad es un riesgo financiero.

El periódico 20minutos publicaba el informe completo del FMI sobre las pensiones. Y lo resumía en su artículo. Entresaco frases del Fondo Monetario Internacional:

“Vivir hoy más años es un hecho muy positivo que ha mejorado el bienestar individual. Pero la prolongación de la esperanza de vida acarrea costos financieros, para los gobiernos a través de los planes de jubilación del personal y los sistemas de seguridad social, para las empresas con planes de prestaciones jubilatorias definidas, para las compañías de seguros que venden rentas vitalicias y para los particulares que carecen de prestaciones jubilatorias garantizadas”. Véase aquí la preocupación por las empresas que hicieron mal los cálculos y contrataron “pensiones vitalicias”. El que la gente no se muera en cuatro días fastidia el negocio. Y eso el FMI no lo puede consentir.

Sigamos: “Las implicaciones financieras de que la gente viva más de lo esperado (el llamado riesgo de longevidad) son muy grandes. Si el promedio de vida aumentara para el año 2050 tres años más de lo previsto hoy, los costos del envejecimiento —que ya son enormes— aumentarían 50%”. ¿Será por eso que también están degradando la sanidad? De paso que proporciona lucro privado, la rebaja de su calidad y extensión mata unos cuantos y reduce la esperanza de vida. En España bajó en 2012, primer año de la Era PP, por primera vez en una década.

En fin, el FMI proponía y propone -por si acaso la mortandad no es suficiente- que la edad de jubilación “aumente”, es decir, que se pague más tarde la pensión o más recortada o/y disminuir el monto de las prestaciones. Cobrar aún menos. El que Vd. cotizara treintantos, cuarenta años, no tiene la menor importancia. Añade el organismo de la ONU –el FMI pertenece a Naciones Unidas como sabéis- que urge ya tomar medidas no vayan las empresas a encontrarse con el fiasco de ganar algún dinero menos. No lo dice así, textualmente, pero le entendemos. Y en España han seguido sus indicaciones como acabamos de ver.

Lo tenemos crudo. Los trabajadores en activo a ver reducidos sus sueldos para “competir” con aquellos a quienes llevábamos décadas de avance en desarrollo. No son aún un problema para la codicia, salvo que se empeñen en comer, estar sanos, o llevar a sus hijos al colegio o a la Universidad por encima de las posibilidades que les ha decretado el sistema.  El resto, en particular los ancianos, constituyen “un insoportable riesgo financiero”.

Entraron contritos por el derrumbe de 2008 que ellos mismos habían causado por su avaricia que les llevó a ejecutar muy malas prácticas y para conseguir la ayuda de dinero público que los reflotara. Se les dio y se les da en cantidades escandalosas, pero no tienen bastante. Iban a refundar el capitalismo. Y sí, les dejamos entrar. Y cuando la bestia empezó a dar muestras más que ostensibles de su depravación, seguimos diciendo que había que esperar. Ahora ya la consigna se centra en el “es lo que toca”.

Aunque empleo el plural, en absoluto me siento responsable de la idiocia colectiva, de la pasividad degradante que ha permitido esta situación. Ya hemos llegado al punto de decir que vivir es un gasto insoportable. No las diabólicas personas que perpetran estos atropellos, el resto.

El gran depredador está instalado en casa. Como humano, tiene la posibilidad de usar su cerebro y las cámaras de gas al igual que su antecesor Adolf Hitler. También puede matarnos de inanición, de hambre, enfermedades y dolor.

Le dejaron entrar las masas desinformadas. Le mantienen ahí los pobres de espíritu. Le alimentan -para que se fortalezca y nos siga destruyendo a todos- cuantos siguen mirando para otro lado y quienes aún buscan explicaciones peregrinas y confían en promesas de “recuperación”. En cabeza, quienes difunden datos incompletos para vender un futuro falso. Lástima que no sean ellos solos, todos ellos, su plato de comida. Aunque no es buena la ley de la selva, mejor sería domeñar al salvaje capitalismo que hoy se enseñorea de nuestras vidas. Es cuestión de vida o muerte. ¿Alguien lo duda?

FMI a los españoles: Cobra menos, paga más, jubílate a pie de tumba y muérete de inmediato

El FMI ha vuelto a echar un jarro de agua fría sobre la pretendida euforia del PP con sus datos económicos –esos que elige parcialmente para ocultar la realidad-. Tras la visita sobre el terreno de “los hombres de negro” el diagnóstico del Fondo Monetario es tétrico: prevé 5 años más hasta la salida de la crisis… y un paro desbordado que estaría en más del 25% al menos hasta 2018.

Sus recetas son profundamente neoliberales: propone rebajar los sueldos un 10% para crear empleo, a través de un gran pacto entre empresarios y sindicatos por el que los trabajadores acepten rebajas de sueldos y los empresarios se comprometan a crear empleo de forma significativa.

Para “motivar” a los empresarios, pide rebajar más las cotizaciones a la Seguridad Social. Y, como el Estado percibiría menos dinero, ha encontrado una solución: subir los impuestos indirectos, medida que afecta a toda la población. El FMI no considera que haya que “motivar” a los ciudadanos. Si encuentran un trabajo con un salario todavía menor del que ya ha dejado la reforma laboral con esa rebaja del 10% se pueden dar por contentos. No importa que tengan que pagar más –todavía más- por todo.

Y es que el FMI dice que, “aunque la reforma laboral de 2012 ha tenido efectos positivos como la caída de salarios en el sector público y grandes empresas, hay otros componentes que han tenido menos éxito» y es preciso «profundizar» en los cambios. Más tajo. Como ejemplo de estar en el buen camino, han puesto la «reforma» de las pensiones que nos cae en Septiembre, pero piden acentuar la poda.

Con todo, ve que ni aún por esas le cuadran las cuentas al gobierno, y por ello propone revisar también el gasto en educación y sanidad y dar otra vuelta de tuerca a la reforma de las pensiones. Es decir, la Biblia neoliberal desde los Consensos de Washington y Bruselas. Cargarse todo lo público.

El FMI prevé que bajará el consumo, pero a eso no le pone remedio. Ni a la contradicción de que difícilmente puede crecer nada –salvo el paro y los cierres empresariales- con semejantes restricciones.

El gobierno andaba hoy de propaganda con sus saneadas cifras de empleo registrado. Lo que ocurre es que el 93% de los contratos han sido temporales y un tercio de ellos, a tiempo parcial, “minijobs” en cobro. Fuera de la estacionalidad, el paro ha subido en 7.591 personas.

Lo grave es que en el proyecto neololiberal de asimilarnos a China, el PP no apuesta como ellos, como los chinos, por la innovación tecnológica. El modelo del PP,según estamos viendo, es precisamente cortar la investigación y basarse en la devaluación de la sociedad, el turismo para extranjeros y…  Eurovegas.

Es cierto que el FMI suele equivocarse en sus pronósticos, pero siempre es a la baja. Es decir, cuando prevé recuperación ésta merma sus porcentajes y sobre todo yerra en las fechas: pone la zanahoria un poco más allá cada vez. Como el gobierno, correligionario del FMI, cuando no anda de publicidad engañosa y asegura, como ayer mismo Rajoy, “Señorías, estamos saliendo de la recesión”. No estamos saliendo, pero además “salimos” más pobres y más fastidiados.

Aún así, según el CIS, el 32,5% de los españoles votarían hoy al PP en lo que llaman «estimación de voto». Cae, lo mismo que el PSOE, y se rasgan las vestiduras los medios por la quiebra del bipartidismo. Es que IU y UPyD suben un poquito, porcentajes absolutamente insuficientes para conseguir el poder.

Ante el escandaloso precio de un producto que necesitaba comprar, le he comentado a la farmacéutica -amiga- lo del FMI. Me ha respondido: Rosa, mejor no pensar. En estas creo que es absolutamente imprescindible volver a leer «La sociedad percebe tiene a su líder en La Moncloa«. Incluso Salmones contra percebes. Yo le he respondido: con «no pensar», cada día estamos peor ¿no? Creo que le he dado la tarde. Un ratito al menos.  A mí me la dan los del no pensar y hay que aguantar, el gobierno, el FMI y ese futuro que se prevé tan negro. Y, desde luego, no es por mi culpa, ni por la de muchos de vosotros.

Por cierto, el deseo del FMI para nosotros es recíproco.

*He cambiado el título por un comentario de @Kamchatka_H. Al menos, aún hay gente ingeniosa.

Doctor, el enfermo agoniza

El FMI acaba de presentar un informe demoledor sobre las previsiones económicas mundiales, augurando “riesgos alarmantemente altos” de frenazo global. La culpa, explica, la tiene Europa. España es el penúltimo de la fila de 105 países valorados. Sólo estará peor en 2013 y en adelante Grecia. Hasta Croacia, San Marino o Sudán van a comportarse mejor. No digamos ya Kirguistán, Ghana,  Bostwana o Senegal que se encuentran en el grupo de cabeza.

Resulta que el FMI nos había pronosticado el año pasado que en 2013 ya estaríamos recuperados y creciendo al 1,8%. Ahora dice que no, que vamos a bajar un 1,3%, que se añade al 1,5% de este 2012. Y que hasta 2017 no cumpliremos el control del déficit para dejarlo en el 3%. Y que eso va a llevar el paro español a la estratosfera.

El FMI es un médico que sabe diagnosticar el estado del enfermo una vez que lo ve amarillo y con los ojos vidriosos. Pero parece incapaz de reconocer cómo le agravan los tratamientos que le receta. Y en los que sigue insistiendo con pertinaz ceguera. A la manera de la medicina medieval, prescribe sangrías a un paciente aquejado de anemia. En cada visita, lo encuentra más depauperado, pero ladea la cabeza y pincha y recorta un poco más. En aquella época –como en ésta- el índice de mortandad era muy elevado.

Lo peor es que el FMI es solo uno de los portavoces de esta corriente mágica. Aún sale el Eurogrupo a pedir a España que “continúe con su estrategia de consolidación fiscal”, es decir, con las sangrías. El organismo que dirige Lagarde culpa a la UE de la recesión mundial. Es cierto, hasta Alemania –que viene a ser la multinacional farmacéutica que se beneficia de la epidemia- va de capa caída. Pero todos ellos se empecinan en el tratamiento: recortes, sangrados (de la población).

¿No saben lo que tanta gente vemos? Salvo, bien es cierto, la categoría “encuestados de los telediarios”, que vienen a ser los homólogos a “votantes de Bush o Romney”… o del PP. Ay, cuánto dolor nos hubiéramos evitado si nos hubieran hecho caso, si, siquiera, hubieran abierto los ojos y usado la cabeza para algo más que para peinarse.

Algunos parece que no. Así tenemos aquel inefable “tendría» que funcionar… pero no funciona, de Luis De Guindos, que aún debe estar preguntándose cómo se les hundió la empresa, Lehman Brothers si “tendría” que haber ido todo de perlas. O cómo es ministro de economía, aunque seguro que se lo explica conociendo a Mariano Rajoy.

Otros sí lo saben. No tienen más que leer, por ejemplo, entre cientos, a Juan Torres López cuando explica las consecuencias de este “desfase” entre los presupuestos de Rajoy y las previsiones reales:

“En primer lugar, los Presupuestos 2013 están basados en un escenario macroeconómico completamente irreal. Es materialmente imposible que, con las políticas que se están aplicando y con las previstas, así como con la evolución presente de nuestra economía se pueda conseguir que la caída del PIB sea solo del 0,5% en 2013. Como también lo es que el consumo privado disminuya tan escasamente como se prevé (-1,4%), que la inversión solo descienda un 2,1%, frente a la caída de quizá más del 10% que va a tener en 2012, que las importaciones disminuyan tan poco (-1,5%), cuando lo más seguro es que el precio del petróleo suba bastante, o que las exportaciones crezcan un 6% (frente a un 1,6% estimado para 2012) cuando sabemos que nuestra producción de automóviles, por ejemplo, está cayendo un 22%, que las pernoctaciones turísticas disminuyeron un 10% en este verano, o que la economía europea se va a resentir cada vez más por el efecto de las políticas de austeridad.

Lo que hace el Gobierno es recurrir a un viejo truco: se infla la proyección de crecimiento y así las cifras presupuestadas de ingresos son mayores, pudiendo presentar entonces mejores registros de saldo presupuestario”.

 Es eso. En la receta funciona, no en la realidad. El enfermo agoniza. Yendo a lo práctico: el triple de caída de nuestra economía indica que… serán precisos más recortes, dirán los médicos medievales. El paciente está ya desahuciado. Solo queda rezar. A lo mejor por eso se han apuntado a la tarea con tal fruición las piadosas damas del PP.

El FMI pide al Gobierno que «profundice» en la reforma laboral

Pero, como no será suficiente, ha pedido a Rajoy alguna cosilla más.

¿Pero era una guerra?

Hacedme el favor primero de pinchar en el enlace del Telediario, en el minuto 6,40, escucharéis decir a Olivier Blanchard, economista jefe del FMI que “reducir la deuda es un maratón, no un sprint” y añadir esta escalofriante frase: “Es útil recordar que llevó dos décadas recuperar los niveles que dejó la segunda guerra mundial. Ahora, llevará lo mismo o más”.

Yo esta guerra me la he perdido. No sus consecuencias devastadoras, pero sí los parámetros que deben regir según el derecho internacional un acontecimiento de estas dimensiones. No sé cuándo se practicó la declaración de guerra, apenas hay partes diario de su desarrollo, casi no sabemos ni quienes son los contendientes.

Deduzco por el desarrollo de los acontecimientos que las hostilidades las inició el poder económico contra el conjunto de la sociedad. Es decir que esta guerra comenzó el 15 de Septiembre de 2008 con el derrumbe de Lehman Brothers y la cascada de quiebras o apuros que se extendieron por todo el mundo, debido a infames prácticas empresariales. Reflotar a todos ellos a ambos lados del Atlántico –excepto a Lehman Brothers- se llevó una ingente cantidad de dinero público que se detrajo de otros objetivos y se sitúa como parte fundamental de la famosa deuda de los países. En aquel momento, los políticos hablaron de “refundar” el capitalismo y de establecer controles a los desmanes financieros. Aquellos días la lucha parecía más o menos equilibrada, nuestros representantes parecían dispuestos a defendernos.

Pero los políticos sucumbieron, en unos casos porque ideológicamente formaban parte del golpe, en otros porque fueron sometidos (no parece que con gran oposición en el caso de los socialdemócratas en particular el PSOE español). El bando agresor se engrosó. Estábamos perdidos. Y nadie oficialmente nos dio cuenta de ello.

Tres años largos de conflicto han cercenado multitud de derechos y degradado las condiciones de vida de gran parte del bando agredido. Lo peor es que muchos no son conscientes de su condición. Ellos siguen mirando la tele y comiendo sopa boba, más aún, van entregando voluntariamente sus pertenencias y hasta sus víveres. Ayer me quedé muy preocupada al ver el mercado del barrio vacío, a los tenderos mirándome con ganas de cazarme a lazo, y la confirmación: sí, la gente se está quitando de comer. Sin una gota de sangre, salvo la que se escapa toda en las víctimas mortales de lo que llaman crisis.

A día de hoy el mismo FMI –que parece ser uno de los organismos más enterados del conflicto- pronostica para la España regida por el PP y sus ajustes de bombardeo insonoro, dos años de recesión por lo menos, con una caída de la economía del 1,7 solo el primer año. Nos avanza los resultados de la batalla diaria. El Banco de España le añade una cifra de parados de 6 millones de personas. Ellos están organizados.

“Es útil recordar que llevó dos décadas recuperar los niveles que dejó la segunda guerra mundial. Ahora, llevará lo mismo o más”, os recuerdo dice Olivier Blanchard, economista jefe del FMI. Terrible afirmación y nada lejana de la realidad, pero ¿sabemos siquiera si la guerra ha terminado? Porque de la Segunda, surgida tras un crack financiero similar a éste y al consecuente estallido de los fascismos (que hoy ya apuntan), se salió con políticas radicalmente diferentes a las que ahora se aplican. Expansivas, keynesianas.

Es de señalar la carta que en aquellos trágicos momentos, envió Keynes, el fundador del capitalismo moderno y algo más humano, al presidente de los EEUU Franklin D. Roosevelt: “Usted acaba de convertirse en fideicomisario de aquellos que, en todos los países, tratan de arreglar los males de nuestra condición por medio del experimento razonado y dentro del marco del sistema social existente. Si fracasa, el cambio racional se verá gravemente perjudicado en todo el mundo y lo único que quedará será una batalla final entre la ortodoxia y la revolución”.

¿Dos décadas o más así? No sé si veré el final… de no cambiarlo. No sé cuál será el de mi hijo y los hijos de otros padres, pinta muy negro. Dice el ministro de economía español Luis De Guindos que si las medidas no funcionan –él afirma creer que sí, quien sabe de esto y abre los ojos sabe que no- sí se verán «afectados» los servicios públicos, sanidad, educación, pensiones… Han ganado.

Pero hubiera sido esencial que nos lo contaran. Saber que esto era una guerra para tomar seriamente posiciones, para exigir a los medios informativos que nos dieran el parte diario de los avances y retrocesos, de los derechos sociales que caían cada día. Para delimitar cuántos de los agredidos se han pasado al bando beligerante como cobayas sin futuro, con su desidia cómplice, para conocer, en definitiva, a qué nos enfrentamos y organizar nuestras estrategias de defensa. La ola no pasará como un mal viento. Es una guerra. Y van ganando.

El FMI reprende a España

La foto no puede ser más expresiva. Christine Lagarde, directora gerente del FMI, sermonea a Elena Salgado (quien por cierto obtuvo matrícula de honor  en la asignatura de economía que impartía José Luis Sampedro). Esto ocurre en el mismo día que el FMI anuncia que igual compra deuda española lo que implica abrir la puerta a nuestro “rescate” y por tanto a unas insuperables condiciones de secuestro, como estamos ya viendo en Grecia, Portugal e Irlanda. Lagarde se subió el sueldo nada más llegar al cargo.

Copio de mi próximo libro: El Fondo Monetario Internacional (FMI) es un organismo intergubernamental especializado de la propia ONU -de representación prácticamente mundial- que… ha tomado vida propia. Sus objetivos iniciales le señalaban el equilibrio sostenible entre países o la erradicación de la pobreza. En la práctica, las líneas de actuación las ha marcado realmente el equipo directivo y, desde que el neoliberalismo tomó las riendas económicas, ésa fue la tónica del FMI que potencia esa ideología allí donde actúa.

“Enseña” a los países a lograr ingresos a través de mermar las condiciones de vida de los ciudadanos, y a privatizar lo público.

 Entretanto el gobierno que presumiblemente gestionará –al modo neoliberal «pata negra» naturalmente- el futuro, tiene como modelo al británico Cameron que ha crecido un 0,01% pero recibe las más altas notas de las agencias privadas norteamericanas. Y cuya ministra de interior es partidaria de eliminar la ley de derechos humanos porque crea demasiados problemas.

(No dejes de mirar el post anterior que hoy va doble la entrega y explica mucho de lo que nos está sucediendo)

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