Mariano Rajoy, «Primer Ministro de las Islas Salomón»

El portavoz de la ONU presentó así, como «primer ministro de las Islas Salomon»  a Mariano Rajoy en su intervención ante la Cumbre de Desarrollo Sostenible Río+20. Aspecto de funcionario, barba cana y desaliñada, pelo teñido de oscuro del que uno espera ver caer chorretones como en mala hora le ocurría a Dick Bogarde en Muerte en Venecia, muy gesticulante, y participante de tercera división. Algo se cruzó en el protocolo, si bien –como dicen los psicólogos- buena parte de los lapsus se interpretan como “actos fallidos”: algún deseo o cadena de pensamientos inconscientes.

Las Islas Salomón se ubican en Oceanía. Pobladas desde el Neolítico como los países de bien, en el siglo XVI recibieron la visita de exploradores… españoles que inmediatamente bautizaron a algunas de sus islas con nombres patrios que aún conservan. Álvaro de Mendalla comandó la expedición y, luego –según costumbre- las inundó de misioneros católicos que convirtieran a los indígenas y de emprendedores que establecieran allí bases comerciales europeas. Aquellos tiempos del Imperio, ya se sabe.

Lo peor es que los lugareños se defendieron con uñas y dientes, al punto de ser calificados de “hostiles y caníbales”. Tres siglos aguantaron las invasiones de la vieja Europa que, mucho más expeditos, pretendían reclutar a la fuerza a los autóctonos como mano de obra esclava. Finalmente sucumbieron, y se convirtieron en protectorado británico a pachas con Alemania. Ya en 1899, el Káiser Guillermo II estampó un punzón circular en las monedas, incluida la española con Rey y todo.

Moneda conmemorativa de la ocupación alemana de las Islas Salomón. Fuente: wikipedia

La ocupación, ay, no revirtió en el bienestar de los indígenas, y como siguieron protestando los dejaron solos, “deslocalizaron” las plantaciones y reprimieron duramente a los disidentes. Una participación decisiva en la Segunda Guerra Mundial (Batalla de Guadalcanal) les hizo visibles, negociación con la obstinada resistencia salomonense, y ya independencia (1978) como miembro de la Commonwealh, con su monarquía constitucional y todo que regenta en la distancia Isabel II.

Dicen las crónicas que los principales problemas del país son la corrupción, el déficit gubernamental, deforestación y control de la malaria (igual es que han recortado en sanidad pública). Ahora se gana la vida con el turismo y como paraíso fiscal (durante una época destino favorito de españoles informados). El fútbol es el deporte más popular, y su selección la más poderosa en el continente. Grandes similitudes y coincidencias como vemos. Alguna divergencia también en el pasado, como esa prolongada y masiva resistencia social.

El primer ministro lo es desde, oh, casualidad, el 11 de Noviembre de 2011. Sin embargo, Gordon Darcy Lilo tiene 47 años, es negro y, como toda la población del país, habla inglés. La confusión, por tanto, no tiene sentido.

Gordon Darcy Lilo. Presidente Islas Salomón

 El portavoz de Naciones Unidas ha pedido disculpas. A las Islas Salomón naturalmente. Noticias sin confirmar afirman que está subiendo la prima de riesgo del país melanesio y baja la española y aventuran que esta confusión podría deberse a la amnistía fiscal de Cristóbal Montoro. España no es Grecia, Islandia, Uganda o las Islas Salomón, como dicen en Twitter: por eliminación terminaremos sabiendo qué somos. Pero los nombramientos de la ONU ¿no sientan jurisprudencia o algo así?… empieza a ser un clamor que Rajoy debería ser Primer Ministro de las Islas Salomón.

*Publicado en Zona Crítica eldiario.es

Mea culpa

Conforme pasan los días me voy convenciendo más y más de que la radiactividad no es en realidad tan peligrosa como pensaba. Resulta que una ha conocido más o menos de cerca los estragos causados por el accidente nuclear de Chernobyl  hace un cuarto de siglo (la tierra quemada que dejó, las malformaciones de los niños nacidos con posterioridad) pero es que eso fue un hecho aislado, debido a la obsolescencia soviética. Convivimos con la radiactividad y no nos pasa nada. Cada vez que me hago una radiografía me sacuden un guisopazo y aquí estoy yo tan campante. Necesitamos la energía atómica para disfrutar de este estupendo progreso que nos rodea a todos los ciudadanos del mundo. Los residuos potencialmente letales –pero solo si se desmandan- son problema de las generaciones venideras, no nuestros.

 Por otro lado, si uno sale a la calle a protestar por la invasión de Irak que han acordado cuatro amiguetes con poder –Bush, Blair, Aznar, y el entonces presidente canadiense- en presencia de Barroso, actual líder o miniterciolíder de la UE, merendándose a la ONU sin empacho y diciendo que Sadam Hussein tenía unas armas peligrosisimas que nos iban a fastidiar a todos, tiene que oponerse de por vida a cualquier acción de fuerza.

Y es que también he entendido que la ONU solo existe para dictar resoluciones sobre papeles, que queden en idems mojados, y gastar mucho dinero. Quedan preciosos allá en Manhattan al lado del Hudson, sentaditos, de tantos colores y vestimentas como hay en el mundo mundial.

Hace un mes que la ONU dictó para Libia la resolución que pide Llamazares –el líder pero no candidato de IU en loor de multitudes-. Una negociación político-diplomática en presencia de observadores internacionales que verifiquen el alto el fuego. Cuatro o cinco «altos el fuego» lleva decretados Gadafi que afronta el asunto como aquel que intenta dejar de fumar: deja todos los días. Pero es lo que tiene que hacerse: hablar y hablar y hablar. Estamos muy guapos hablando.

Sí, la ONU solo está para eso. Limpia mucho nuestras progres conciencias enarbolar banderas y dejar hacer a otros, lo que sea. No a la guerra, no señor. A la nuestra, que los libios llevan un mes a bombardeo limpio por parte de San Gadafi. Menos mal que así se consiguió parar a Hitler, y a Franco, y nuestro país, España, es un paraíso de gente crítica y responsable, altamente educada.

He comprendido también que si en Libia no se ven muertos –como si veían en Túnez o Egipto- es porque no los hay. Gadafi no mata… sólo impide que entren periodistas. Pero lo que no se ve no existe y eso lo saben muy bien los dictadores listos aunque estén locos. Esos vídeos colgados en youtube de mutilaciones y muertos los han hecho unos opositores muy malos y muy tontos que se matan ellos solos para fastidiar. Todo sea por la causa ¿Cuál? Llevar a Libia a un callejón sin salida, infinitamente peor que una dictadura chantaje y amor de los intereses económicos occidentales.  

 Y es que debo quitarme para empezar ese gusto por la sangre inocente de ciudadanos indefensos. Los que matan sin parar y a miles y millones las malvadas bombas occidentales. He de hacer propósito de enmienda.

Además, es verdad, ¿por qué han empezado por Libia? Ayer contaba mi opinión pero está equivocada. No es porque Gadafi mata «presuntamente» a sus ciudadanos y Ben Alí y Mubarak también pero menos que se fueron y todo, es que las acciones no pueden empezar por parte alguna. Si no se arregla el mundo de golpe, es mejor hablar y hablar.  Qué bien lo vamos a pasar. Como somos tan resolutos, arreglar todos los conflictos de vez nos puede llevar siglos debatiendo y poniendo y quitando comas.  Entretanto, mover un dedo ni locos.

Soy consciente asimismo de que voy por muy mal camino. Soy radical.  He de montarme un medio informativo (del aire o empeñándome) y abandonar mi vida y mis proyectos, para escribir, gratis, todos los días y de todo, mencionando todas las posturas. Éste dice, el otro dice y ya. Debo ser más objetiva.

Como he escrito en http://www.escolar.net/MT/archives/2011/03/los-amigos-de-gadafi.html, con pseudónimo, y van camino de ocultar el comentario a democráticos negativos, lo mejor que leí ayer fue este tuit: @Ludens76 Organizar una manifestación por el #noalaguerra, que la bombardeen y pedir que nadie haga nada. Eso sí es coherencia. Y yo tengo que ser coherente y fiel. Parece que la derecha no me quiere mucho y ahora resulta que sectores de presunta izquierda tampoco. Están escandalizados. Mira que no seguir consignas y cuestionarlas… pero  ¿Que haré yo sin amor? Soy una inconsciente ¿no sé a qué me arriesgo? Sí, pero se conoce que me va la marcha. Y no, eso no es práctico. Debo revisar incluso mi postura acerca del neoliberalismo. No vaya a ser que tengan razón quienes lo defienden con tanto ahínco.

 Voy por muy mal camino y me arrepiento. Así ni contentaré a todos –que para eso estamos- ni medraré. ¿No recordaba que ése precisamente ha sido mi objetivo vital durante mi trayectoria todita toda?

http://www.youtube.com/watch?v=8YGXsw3XK9I

Actualización.

Ruego un poco de calma. Ni vosotros ni yo -solos- vamos a arreglar el mundo. Las discrepancias no deberían tomarse como algo personal. Pero tampoco querría coartarme y no escribir lo que pienso. De todos modos, un poco de calma, insisto, no vendrá mal.

¿Por qué la UE sí ha actuado en Libia?

Cuarto Poder me publica una tribuna con este título.

Acusábamos hace menos de una semana a la llamada “Comunidad Internacional” de permanecer impasible ante la matanza de los libios y ahora nos rasgamos las vestiduras porque la ONU ha actuado y con inusitada resolución (los aviones llegaron a Bengasi y Trípoli antes de que se secara la tinta de la firma en Nueva York). Hace nada era demasiado tarde, ahora demasiado deprisa.

Se dispara el rechazo del #noalaguerra, cuando Libia lleva en ella un mes. El no, por tanto, es a la presencia occidental en ella.

Las etiquetas ideológicas aportan inapelables certezas para explicar lo ocurrido en la ONU: es por petróleo. En el mejor de los casos, porque la teoría de la conspiración en conciliábulo imperalista se abre paso también, esparciando por doquier altas dosis de demagogia. Gadafi es un tirano, o un repentino benefactor de sus ciudadanos. Sus opositores (con tantos muertos ya como en un tsunami, 8.000) “no son trigo limpio” ¿merecían un dictador por tanto que los sujetara?

En la era de la desinformación, de las “creencias” (más que de la opinión), de los ciegos carriles ideológicos, seguimos sin saber qué ha ocurrido realmente para que la gran cámara internacional se sacuda las telarañas. Lo que resulta una falacia redomada es confundir diciendo que Libia es lo mismo que Irak. Nada que ver la unilateral reunión de Las Azores, con inventada excusa de unas armas de destrucción masiva atesoradas (con certeza, decían) por Sadam Hussein, y desoyendo a la ONU, que una resolución del Consejo de Seguridad para frenar las bombas de Gadafi sobre sus opositores ya en la calle.

Dicho esto, incontables resoluciones de la ONU duermen en las oficinas de Naciones Unidas entre el polvo, incluidas las dictadas contra Israel en su conflicto con los palestinos. Y medio centenar de guerras olvidadas se dirimen hoy en soledad.

¿Qué ha ocurrido entonces para que la Comunidad Internacional haya actuado?

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Y, entretanto, Gadafi sigue matando civiles…

Responsabilidad de proteger

No resulta nada fácil el debate personal entre la necesidad o no del uso de la fuerza para obtener fines superiores. Suele ser el comienzo de una bola de nieve que se va engrosando en su mortífera caída por la ladera. Pero la realidad es que no vivimos ni mucho menos en un mundo perfecto y que esta fuerza va contra otra fuerza: la que ejerce un Estado sobre sus ciudadanos (quizás la peor que puede existir).

El Consejo de Seguridad de la ONU ha aprobado finalmente el uso de la fuerza para imponer la zona de exclusión aérea en Libia. Emilio Menéndez del Valle nos explica cómo se ha ido abriendo paso en Naciones Unidas –sin que nosotros lo hayamos notado realmente, yo no- lo que llama la “responsabilidad de proteger”.

“Se trata de una doctrina sobre seguridad internacional (paz justa incluida) y derechos humanos que incorpora principios fundamentales. Ante todo, establece que el Estado es el primer responsable de la protección de su población, a la que no puede agredir. La soberanía de los Estados incluye derechos, pero también deberes y responsabilidades. Si se da el caso (como ha ocurrido en Libia, Egipto, Túnez y otros) de que los Gobiernos son incapaces de proteger a sus poblaciones (o son cómplices o actores directos) del genocidio, crímenes de guerra, limpieza étnica o crímenes de lesa humanidad, la comunidad internacional (vía Naciones Unidas) tiene la responsabilidad de entrar en acción. El objetivo principal es librar a la población civil de un Gobierno manifiestamente injusto, tiránico y usualmente corrupto. La responsabilidad de proteger debe ser inicialmente promovida mediante medios pacíficos. Habitualmente, especímenes tipo Gadafi, Mugabe, militares birmanos u otros de semejante ralea, no suelen ser sensibles a tales enfoques. De ahí que a la postre, para proteger a los inocentes, se deba recurrir a medidas coercitivas, incluida la fuerza militar”.

La práctica de la teoría ha dejado ejemplos de amargo recuerdo. Esperemos que no sea así esta vez, que la ONU equilibre las fuerzas en Libia, impida las bombas del tirano (al que tantos alimentaron), cese la hemorragia de un pueblo valiente que se levanta -con gran riesgo- por sus derechos y se vaya. La ONU actuaría así como un gobierno mundial. Luego la Justicia Internacional dirimiría las responsabilidades del tirano.

Otra noticia también llama hoy mi atención. El G7 intervendrá en los mercados para respaldar a Japón. Los cuervos especuladores habían entrado a saco a lucrarse de las desgracias varias de Japón. Terremoto, tsunami y crisis nuclear son “una gran oportunidad de negocio»… privado. el entrecomillado es lo que suelen pensar, ya es incluso lo que suelen decir sin pudor. Así el yen alcanzó estos días su cotización más alta desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. El Banco central nipón ha tenido que inyectar millones para frenar la “carrera alcista” de su moneda, en lugar de dedicar, pongamos por caso, esos fondos a socorrer a la población. Los autores han sido ese ente al que siguen llamando “los mercados”. Pero de abstracto nada. Investigue mínimamente algún interesado en sus filiaciones, nombres y apellidos, a través de las transacciones realizadas estos días. Ésos son “los mercados”, ésos los cuervos carroñeros. Ésas son las leyes del “libre mercado” tal y como está ahora.

Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá y el Banco Central Europeo se han unido para frenar la subida del yen. No es que el G7 sea mucho de fiar, pero esta vez hay que aplaudir su acción. ¿Responsabilidad de proteger? No sé por qué lo dudo, pero sí parece ser ése su efecto.

Quedan muchas más cosas por preservar, por defender (que no es lo mismo), muchas. Pero este viernes luminoso amanece con ciertas esperanzas. Necesitamos un respiro.

Tenemos un problema: estamos en manos de inútiles

Es un vídeo casero que muestra cómo actúan los mercenarios de Gadafi. En Libia no se permiten periodistas. Y, mientras centenares de libios se desangran literalmente por la represión que sobre ellos ejerce el diabólico tirano, la llamada Comunidad Internacional debate si quizás pudiera ir a por vendas para contener la hemorragia, siempre que no le moleste a nadie y encuentren el adecuado consenso. Pocas veces como hoy llego al absoluto convencimiento de que estamos en manos de discapacitados, de unos seres que viven en un limbo artificial que se han fabricado con nuestro permiso tácito y lo que es aún peor: con muy turbias inclinaciones en sus escasas y envanecidas neuronas.

Mantenemos una organización, la ONU, que reúne a 192 países (prácticamente todos los del mundo) y alimenta suntuosas sedes y presupuestos. Amplias delegaciones se juntan en Asambleas. Por lo que cuenta la crónica de Clarín, el embajador adjunto de Libia en la ONU, Ibrahim Dabbashi, –que se ha posicionado en contra de Gadafi- imploraba ayuda a la sala: “¡Están disparando contra toda la gente que está en las calles de Trípoli!”. Pero no hubo consenso más que para aprobar “una declaración de condena”, nada de sanciones, ni acción alguna. A lo sumo, poner mala cara al primer embajador libio que sí apoya al dictador. Eficacia suprema.

Toda la Comunidad Internacional está haciendo lo mismo. Dudan los demócratas estadounidenses de si tal vez se podría meditar la conveniencia de pensar en la posibilidad de estudiar, prudente y meditadamente, algo que tal vez hacer. Algo más que llevarse de Libia a sus nacionales. Es el mismo país que, como contaba ayer, se cargó a 70 civiles en 1986 bombardeando Trípoli para parar los pies “al terrorista Gadafi”.

Lo de la UE es tanto o más patético. Pasea por el mundo Lady Ashton (la Alta Comisionada la llaman) su cortedad infinita, pareja a la del Presidente permanente Van Rompuy. Y no muy lejana al inoperante y turbio Barroso. Así los eligieron premeditadamente. Huecas palabras de condena salen de la UE, mientras eso sí, se aprestan a reunir a sus ministros de interior en Roma  -a todo trapo, viaje, alojamiento, comidas y dietas-, para ver «cómo hacen frente a la inmigración árabe» que va a llegar al paraíso europeo. Qué asco. Ayer un periodista del periódico francés Libération, a quien escuché en euronews, fue bien contundente y definitorio: “La UE no habla con una sola voz, es una cacofonía. Están como conejos asustados en una carretera cuando de noche les deslumbran los faros de un coche”.

 Viven fuera de la realidad. Todos. No estoy oyendo ni a un solo gobernante que se esté dando cuenta de a qué se enfrenta. Fluye la sangre a borbotones abandonando la vida en Libia y otros países árabes, hartos de tanta desvergüenza y tanta tiranía. Pero en la anquilosada Europa, en el mundo occidental, sufrimos hemorragia similar y nadie hace nada por remediarlo. Estos bastardos inútiles bajan la cerviz ante los especuladores que exigen cada día más cuotas.

Un instituto alemán dice hoy, por ejemplo, que España tardará 10 años en crear empleo, y eso siempre que se acometa en serio la “reforma laboral”, porque ésta que nos implantan es demasiado tibia. “Hay toda una generación perdida de españoles jóvenes que carga con la losa de tener que trabajar toda su vida para pagar una vivienda que vale la mitad de lo que pagaron«, dice un experto para Reuters, en un reportaje que demuestra el dramático timo del que hemos sido objeto. Y el pillaje prolonga sus tentáculos hasta el futuro. Y, entretanto, el BBVA hace un acuerdo con la OCDE –otro de los portavoces del “sistema”- para que el Informe PISA evalúe conocimientos financieros en los chavales. Que aprendan a usar talonarios y cuentas corrientes, que aprendan los mecanismos de su futura y eterna servidumbre.

Llevo ¡30 años! recordando el 23F, 30 veces en mi vida, como mínimo, viendo al chusco militar con bigote irrumpir en el Congreso de los Diputados español. ¡Ya vale! Nos están comiendo vivos, aquí y ahora, en este barco a la deriva en el que vivimos. Los patrones deliberan en el puesto de mando en una burbuja con una copa de ceguera e incapacidad en la mano. El horripilante y acartonado muñeco sanguinario que amenaza –y cumple- sus desvaríos desde Trípoli no es sino un símbolo más de las marionetas a quienes hemos entregado nuestros destinos. Y no hay derecho: han devaluado la Política, imprescindible en un sistema democrático.

Telediarios en 1997

Repasar vídeos antiguos ofrece curiosas perspectivas. Hoy os traigo algunas noticias emitidas en los telediarios internacionales de TVE en 1997, hace 13 años, que –además- engrosan mi “egoteca.”

  •     La ONU andaba buscando cómo afrontar una reforma que la hiciera más eficaz. Koffi Annan, algo más brioso que su sucesor, se lo propuso, pero…
  •     Bruselas decía que la economía española iba bien –todas las «de siempre» lo iban entonces-, y, sin embargo, «necesitábamos ciertas medidas para crear empleo» ¿cuáles? Moderar los –decrépitos– salarios y… ¡flexibilizar el mercado laboral!, la Europa azul no cambia su discurso, lo endurece… Y España creó empleo a pesar de todo, de forma espectacular… cimentada en el «ladrillazo«, con su dinero negro -negro en el pago de los trabajadores que erigen los edificios, negro en la compraventa (al menos en una parte), negro en las comisiones-.

Israel, actualidad infinita. Con el mismo Benjamin Netanyahu al frente, y con idénticas políticas, y el mismo acatamiento a las resoluciones de la ONU. Con el proceso de paz que nunca concluye. Hace 13 años, recuerdo.

El tramo final de los telediarios se distiende. Con Tom Martín Benitez, que se incorporó a lo largo del año, damos cuenta de un par de subastas solidarias. Pertenencias de famosos. En ausencia aún del euro, solía empeñarme en traducir a dólares a nuestras discretas pesetas, no fuera a ser que más allá del Atlántico no supieran de qué cantidades hablábamos. Ayer como hoy, alguien quería tener un objeto perteneciente a alguien conocido. Tampoco es que pagaran cantidades desorbitadas por ello, pero había un cierto morbo: saber qué celebridad «tiraba» más. Año 1997. Aznar en la Moncloa cuando todavía su minoría parlamentaria le llevaba a hablar catalán en la intimidad…

¿Qué ha cambiado en 13 años? ¿Podrían emitirse estos telediarios como actuales sin que nadie notara la diferencia? Sospecho que sí. Los viejos problemas siguen enquistados… pero se han añadido algunos más de enorme gravedad (hablamos de ellos a diario). Y a casi nadie parece importarle. 

 ( Personalmente, ver esto me produce una mezcla de relativa nostalgia y una pizca de frustración. Y, a pesar de ello… redobladas ganas de seguir en la brecha 🙂 Creo yo, no sé).

Abierto el tema a todo tipo de comentarios….

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