Todavía hay 349.300 parados más que cuando Rajoy llegó al poder

pais.epa,junio.2014

La noticia es tan importante que, El País, el periódico cuyos principales accionistas son ahora Liberty y Morgan Stanley, le dedica todas las columnas de su portada en la web. El resto de los medios muestran similar júbilo.

Nada leo de la precariedad de los contratos, consagrados ya los que son a tiempo parcial y temporales como los mayoritarios. Ni cómo están remunerados, dado que la reforma laboral ha supuesto una bajada generalizada de sueldos. Hoy me contaba una periodista en Twitter el caso de un contrato de un día, 9 horas trabajadas por 30 euros. Pero tampoco reseñan los datos esenciales de cuando Mariano Rajoy llegó al poder. Una gestión se mide en la distancia, en su trayectoria. Las noticias suelen necesitar sus antecedentes.

Veamos:

La EPA del cuarto trimestre de 2011 recogía la escandalosa cifra de 5.273.600 parados, un 22,85% de tasa sobre la población activa. Tomo la reseña oficial del mismo periódico que hoy estalla en columnas de alborozo.

Hoy, tras dos años y medio de gobierno, el PP tiene el número de desempleados en 5.622.900 (curiosamente El País señala que es «el más bajo desde el cuarto trimestre de 2011» pero, vaya por dios, olvida poner la cifra de entonces). Y la tasa de paro en el 24,47%.

Es que ahora los medios grandes de información (en caída libre de lectores) se han vuelto muy positivos. Quieren animar a la gente, y desterrar recuerdos que podrían enturbiar el gozo que disfrutamos.

Hoy, a pesar de la gran «movilidad exterior», como ellos la llaman, hay 349.300 parados más que cuando Rajoy fue elegido presidente ¿No debería preguntarse algún medio qué diablos ha hecho para aumentar el paro y además la precariedad? ¿No es una cuestión imprescindible? ¿Cómo se puede elogiar a un gobierno que tiene mayor desempleo del que encontró? ¿Que nos están vendiendo todos ellos?

 

Gráfica elaborada por ABC en la que se ve claramente que con Rajoy subió el paro más aún que con Zapatero

Gráfica elaborada por ABC en la que se ve claramente que con Rajoy subió el paro más aún que con Zapatero

 

El PP de luto riguroso… y destrozando bienestar ciudadano

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De esta guisa –luto riguroso- han comparecido la vicepresidenta y dos ministros para la rueda de prensa tras la reunión gubernamental de los viernes. Pero el dolor no les ha impedido ejecutar medidas que dañan a la sociedad. No sabemos si todo el Consejo ha sido una reunión enlutada -digna de verse- o solo se han vestido para la ocasión los que iban a comparecer ante la prensa.

Acababan de dar un hachazo considerable a la Administración local. Con el frontal rechazo de toda la oposición por cierto. Una de las tragedias más llamativas de cuantas contiene es la merma que va a suponer de hecho en los servicios sociales, tras pasar la competencia municipal a las Comunidades autónomas.  Unos 70.800 empleos en servicios sociales se ven en peligro, según El País. Lo que afectaría a 2,600.00 beneficiarios de prestaciones (en ayuda a domicilio, apoyo a la familia, inserción social, albergues para inmigrantes, comedores) y también se quedan en el aire 30.000 plazas en residencias de mayores.

Han aprobado asimismo lo que parece una inocente Ley de Seguridad Vial pero puede ser en la práctica un importante mecanismo de control. Ley “reformada” al gusto del PP naturalmente. Se incluyen pruebas de drogas y alcohol a los peatones que infrinjan normas de circulación y no solo a aquellos que sean víctimas o copartícipes de un siniestro. Resulta sorprende esta modificación dado el gusto por el vino y los gintonics mostrado en ese partido desde su presidente de honor, José María Aznar al que fuera su portavoz Miguel Ángel Rodríguez o los numerosos militantes y cargos que han causado incluso accidentes conduciendo -no ya andando solo- borrachos. Pero el carnet del PP representará seguramente una exención.

Son medidas de hoy mismo -ya no hablamos siquiera de la larga lista de atropellos que está sufriendo la ciudadanía-, a pesar de tan compungido dolor que lleva a disfrazarse de negro. Claro que un diputado y alto cargo de las Cortes valencianas ha sido más sincero. Le podía la comezón. Luego ha pedido perdón y ha retirado el twit. “Lo siento mucho no lo volveré a hacer” triunfa en este país, aunque eso no elimine en absoluto el daño. Se da la circunstancia de que este señor, Rafael Maluenda, presidió la Comisión que dio carpetazo a la «investigación» del accidente en el metro de Valencia. Casualidades de la vida.

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Luto. Mascarada. Teatro. Hipocresía. Cuervos apostados en la ventana de nuestras vidas.

Golpe a golpe

Cada mañana el mismo mecanismo aproximadamente. Abro los ojos esperanzada porque forma parte de mi carácter el intentar remontar. El día, ayer, acabó en bruma por las terribles noticias que se estaban produciendo, pero la noche suele disipar esa sensación. Con un café, me siento en el ordenador y miro la actualidad en distintas webs. También anda en mis genes el querer informarme… y comunicar lo que encuentro. Y twitter me brinda la oportunidad de ese remedo del periodismo que oficialmente me privaron de ejercer.

Me entero de los detalles que condujeron al suicidio a José Miguel Domingo, un granadino de 54 años que ayer se ahorcó poco antes de que la autoridad competente llegara a desahuciarle, a quedarse con la casa familiar por la que había pedido una hipoteca. No quiso sufrir, vivo, esa vergüenza.

Un informe del Consejo General del Poder judicial, de uno de sus miembros en realidad, denuncia prácticas abusivas de los bancos en el drama de los desahucios: 350.000 desde que se inició la crisis. Propone medidas para resolverlo. Entre ellas transferir a los hipotecados las ayudas a la banca. Pero la mayoría de los vocales del máximo órgano de los jueces decide lavarse las manos y lo rechaza.

Concretamos también lo que hemos venido contando en este blog (y en otros, claro está): que Zapatero sí hizo el trabajo sucio que Rajoy le acusa de no haber hecho y con el que pretende justificar sus recortes: entregar dinero público a los bancos para reflotarlos. Solo en 2010, se les dieron 87.145,47 millones. Es decir, salieron de los bolsillos de cada ciudadano a este fin 1.846,67 euros. Pero no era la primera vez. Ni la última.

Aún me duelen más, sin embargo, los 14 subsaharianos que han perdido la vida en una patera, los 40 al menos que dicen los supervivientes que también viajaban allí y han desaparecido. Esos 17 que han llevado vivos a Motril (Granada), con el horror en los ojos. Inmigrantes valientes, con ganas de lucha, que emprenden tan costosa aventura porque aún están peor en su tierra de lo que esperan estar aquí.

Siguiendo el periplo, veo que la Generalitat de Cataluña, henchida de independentismo populista y oportunista, ha dejado sin renta básica a los más pobres. Ah, sí, cambiáis derechos por jalear el deseo electoral de un partido cada día con más sospechas de pufos a sus espaldas. Dicho sea el «sospechas» por imperativo legal.

Y aún persiste mi indignación porque la funcionaria liberada -en permanente campaña electoral a la presidencia del Gobierno de España-, rescató con nuestro dinero a los hospitales de gestión privada. Iban a funcionar mejor, decía y presumía, pero perdían dinero y había que compensarlo. El objetivo era ése, no la salud de los madrileños que -como en otros lugares, bien es cierto- tenemos una sanidad cada vez más degradada.

El gesto, aún animoso aunque parezca imposible, se empieza a torcer al ratificar que la ultraderecha se abre paso en Europa. En la Grecia, sumida en la pobreza y la anarquía, los canallas de Amanecer Dorado ya han ganado la calle.  «Esto es como lo que pasó en Alemania en los treinta», dice el director de un espectáculo amenazado por los nazis griegos. Pero el ascenso del fascismo no solo ocurre en Grecia.

Casualmente, Isaac Rosa, nos trae a las calles de Madrid, a las calles de España, con la abrumadora presencia policial allá donde vayas. Y se pregunta: ¿A quién protegen? ¿Y de quién?

Un alcalde de Fortuna (Murcia) del PP: cambió votos por trabajo y vales de comida, según acredita una sentencia. Y las felonias descubiertas de Urdangarín, no cesan.

El Rey dice que ya se ven brotes verdes  en la economía y que el PP lo está haciendo de pura gloria. Por ahí, de viaje, a la India adonde ha ido a «vender» la Marca España.

Ya. Pero sale la EPA, y batimos otro récord de desempleo: 5.778.100 personas, 1 de cada 4 que quiere trabajar. Rajoy ha dejado a 835.900 ciudadanos en el paro en solo un año. Y eso que dice Sor Fátima Báñez que la reforma laboral funciona que da gusto.

Hay asuntos que urgen más que el empleo y la economía. El PP impone el trámite de urgencia para aprobar el copago judicial de Gallardón, pese a una y cien mil protestas.

Y, mientras, lo más visto en el ya desarbolado El País, es esto: «Cuando llegué ya estaba desnudo«. Un príncipe o así. De Inglaterra. En El Mundo y ABC lo que interesa es un fraude de consumo en el aceite de oliva virgen. En los dos periódicos. Su empecinado empeño en hablar de Cataluña, independentismo y lo malos que son, no cuaja en los lectores ni de esos medios. En eldiario.es que no pagan a los profesores de la Universidad Complutense por los recortes.

He llegado sin resuello al fin del café y de la lectura de prensa. Como si fuera un saco de boxeo al que aporrea la realidad… que producen personas concretas. ¿Golpe a golpe? Pues no, aún no, mejor verso a verso…

 

Nuevo récord de paro… recostado en el «colchón» familiar

Los recortes y la reforma laboral han colocado el paro en España en el 24,6%, según la encuesta de la EPA, casi 1 de cada 4 personas en edad de trabajar no encuentra colocación. Son 5.693.100, un récord impensable en el mundo desarrollado. Nos estamos acercando pues a las previsiones de organismos internacionales como el FMI que fijaron la recuperación de las cifras de empleo en España en 2023. O las de Luis De Guindos que cifraba la pérdida este año en 630.000 personas -a pesar de sus políticas a presunto «largo plazo»- y en un 24,3% que ya ha sido hoy rebasado, sin esperar a que el fin del verano arroje más españoles al paro.

Merece la pena detenerse en algunos datos concretos:

Alcanzamos ya el 53,3% de paro juvenil y no parece representar una emergencia nacional como lo es el rescate de Bankia en donde todos dicen que lo hicieron tan bien. Ni la modificación de la ley aborto que se propone perpetrar Gallardón antes de octubre. La solución que les aportan es que se vayan de España… dejando un país de viejos.

Ya hay 1.737.600 hogares con todos sus miembros sin trabajo. Parte se habrán “acogido” a la economía sumergida que es el pan para hoy y el hambre para mañana porque detrae en su conjunto el 23,3% del PIB de todos los españoles. Pero fundamentalmente se sostienen por el llamado “colchón familiar”… tercermundista. De colectividades en desarrollo sin estructuras de Estado social.

Mucha gente está viviendo de las pensiones de los abuelos. En múltiples casos los han sacado de residencias. Por ley de vida morirán antes que el resto de la familia ¿de qué vivirán entonces? Difícilmente cumplirán los años cotizados para cobrar su propio subsidio que, además, “Bruselas” y el PP quieren alejar en el horizonte (solo para cobrar menos) y rebajar, además, su cuantía. El “colchón familiar” puede pinchar.

Pero quiero centrarme en otro punto. Estos abuelos colaboran además en tareas del hogar. En mi reciente viaje a la UIMP de Santander, encontré en el ascensor al salir del hotel a un matrimonio muy mayor que se apenaba de terminar las vacaciones y dejar una temperatura ideal para recalar en el horno contaminado de Madrid, pero “los hijos nos necesitan” dijeron, responsables y hasta contentos. Al llegar a la estación de tren de Madrid, concretamente al aparcamiento, volví a encontrar a la pareja. El hijo apremiaba al padre a buscar el coche de muy malos modos, evidenciando la presunta torpeza de su progenitor. Yo estaba agotada tras 4 horas y media en el vagón, imagino que los ancianos mucho más.

Aquellos niños de la posguerra que pasaron tantas penalidades, vuelven a pagar la factura: económica y en esfuerzo. Y salen ahora en TVE felices porque “a sus hijos les gusta la comida la comida de mamá”, al menos en los cortes que nos ofrecen. Ni estoy segura de que la enseñanza de sus sacrificios haya calado en sus descendientes.

Arturo Fernández. Vicepresidente de la CEOE

Ese hombre elegante, con el brillo de inteligencia en la mirada, recientemente cesado con Rodrigo Rato como consejero de Bankia, que se llevó la contrata del catering de la JMJ y ostenta desde hace años las del Congreso, el Senado y RTVE  y que, como en su día su cuñado el implicado en distintos pufos Gerardo Díaz Ferrán, representa al empresariado español, pide más y más duros recortes. Y sus deseos son órdenes para el PP. Pero, así, ni en 2043. Tras analizar la situación española en su conjunto, y a raíz del dato del paro, un experto dice a la BBC: «Las cosas solo pueden ir a peor«. Coincido, salvo que la política seguida cambie de manera radical.

No sé, vosotros veréis.

Rajoy debe dimitir

Datos históricos de desempleo en la Encuesta de Población Activa (EPA). El paro sube a 5.639.500 de personas, el 24.44%. En un solo trimestre, el primero de 2012, 365.900 trabajadores se han sumado a la escandalosa cifra que nos sitúa en el récord del mundo industrializado. Suben también los hogares en los que todos sus miembros están en paro, sobrepasan ya el 1.700.000. Además ya son más de la mitad de los jóvenes (el 52%) los que se encuentran sin trabajo.

La dramática situación en España abre las páginas web de medios internacionales. Y buena parte de ellos se preguntan si las reformas de Rajoy no van a servir de nada.

Si los organismos internacionales y numerosos nacionales calculaban acabar este año con unos insostenibles 6 millones de desempleados, los abrumadores datos de la EPA, hoy, hacen prever en la lógica un horizonte mucho más negro aún. La causa es la política de austeridad suicida, la reforma laboral sin duda, y la escasa confianza que genera el gobierno del PP. Ayer, el buitre calificador S&P ya había bajado la nota de España hasta dejarla a dos escalones del bono basura.

Cuando, como Rajoy y todo el PP, se ha basado la campaña en pedir elecciones anticipadas por las cifras de paro, cuando se ha sostenido toda la estrategia previa en la promesa de crear empleo, este rotundo fracaso no puede desembocar en otra medida que la dimisión. González Pons llegó a prometer 3 millones de empleos. Si Rajoy no se va ya, el futuro es la pura ruina que el gobierno a la deriva intentará pagar con más recortes a la población, y con la mano dura contra las protestas.

¿Con qué clase de mentiras y falsas promesas “justificará” el PP tamaño desempleo en un trimestre completo de gestión que les compete exclusivamene a ellos? estad atentos que pueden llegar a ser muy creativos.

Enlazo un artículo rotundo de Juan José Millás , en la línea de lo que siempre decimos aquí; es decir, en la manipulación del lenguaje que es tanto como la manipulación de las ideas que llegan a las mentes poco preparadas y poco entrenadas en el ejercicio de pensar…. Un sindios:

«Desde que los ministros de Rajoy, en especial Montoro y Ana Mato, decidieron explicar didácticamente los porqués de la demolición del Estado, entendemos las cosas mucho mejor. He aquí un resumen, claro como el agua, de sus argumentos: Se pone precio a la sanidad para que continúe siendo gratuita y se expulsa de ella a determinados colectivos para que siga siendo universal. Se liquidan las leyes laborales para salvaguardar los derechos de los trabajadores y se penaliza al jubilado y al enfermo para proteger a los colectivos más vulnerables. En cuanto a la educación, ponemos las tasas universitarias por las nubes para defender la igualdad de oportunidades y estimulamos su privatización para que continúe siendo pública. No es todo, ya que al objeto de mantener el orden público amnistiamos a los delincuentes grandes, ofrecemos salidas fiscales a los defraudadores ambiciosos y metemos cuatro años en la cárcel al que rompa una farola. Todo este programa reformador de gran calado no puede ponerse en marcha sin mentir, de modo que mentimos, sí, pero al modo de los novelistas: para que la verdad resplandezca. Dentro de esta lógica implacable, huimos de los periodistas para dar la cara y convocamos ruedas de prensa sin turno de preguntas para responder a todo. Nadie que tenga un poco de buena voluntad pondrá en duda por tanto que hemos autorizado la subida del gas y de la luz a fin de que resulten más baratos y que obedecemos sin rechistar a Merkel para no perder soberanía. A no tardar mucho, quizá dispongamos que los aviones salgan con más retraso para que lleguen puntuales. Convencidos de que el derecho a la información es sagrado en toda democracia que se precie, vamos tomar RTVE al asalto para mantener la pluralidad informativa. A nadie extrañe que para garantizar la libertad, tengamos que suprimir las libertades».

Sí, las libertades, eso por añadidura…

¿Está pasando? ¿Lo estoy viendo?

Nunca creí que viviría esto. Una nació a la consciencia responsable entre revoluciones ingenuas de flores e ideales, tras sentir una especie de tenaza difusa en la niñez que obligaba a no hablar de ciertas cosas con nadie y a hacerlo en casa en voz muy baja por si las paredes oían. Vi después que, con esfuerzos y tropiezos, algunas cosas comenzaban a marchar. Y fui testigo privilegiada de la caída del Muro de Berlín que tanto recuerdan hoy las revueltas del Norte de África. Solo éstas, porque también fui descubriendo los graves defectos estructurales del lado occidental del Muro que, llegados al paroxismo, son asumidos por los afectados con una pasividad que enerva a gente como yo y muchos otros.

Hablábamos ayer del insultante acuerdo sobre pensiones y del paro juvenil. Los datos de la EPA de hoy, profundizan en el descalabro. 20,33% de paro, casi 4.700.000 personas, la más alta desde 1997. Crece el desempleo, precisamente, en el tramo de los menores de 35 años. Muy pocos de ellos se jubilarán con el subsidio completo, si es que llegan a trabajar alguna vez. Aumenta el trabajo de las mujeres (las peor remuneradas). El número de hogares con todos sus miembros activos en paro aumenta en 35.600 en el trimestre y se sitúa en 1.328.000. Lo que deja entrever que, sí, que hay que recurrir a la “red social” de Caldera –es decir, la familia como en los países subdesarrollados- y que cada vez más gente se pasa a la economía sumergida, evaluada hace tiempo en el 23% Esta gente, por necesidad o no, nos roba a todos los demás. Y han de existir leyes y parlamentos que pongan coto a tanto desmán. Pero no parecen estar por la labor.

De hecho, me tiene auténticamente irritada el plan que nos prepara el CGPJ para consagrar que, todavía más que nunca, la justicia sea solo para los ricos. Esto dice El País:

El Poder Judicial avala recortar derechos ciudadanos para acabar con los atascos de los juzgados 12.000 recursos contra la Agencia Tributaria esperan desde hace años que el Supremo los resuelva . El anteproyecto legal, supone, en la práctica, un recorte de garantías ciudadanas, puesto que restringe y endurece la posibilidad de los ciudadanos de que sus casos lleguen hasta el Tribunal Supremo. Obliga a los ciudadanos a pagar tasas para interponer demandas, suprime recursos e impone que los ciudadanos que pierdan un pleito contra la Administración (por ejemplo, un recurso contra una multa) paguen las costas del proceso (las minutas de los abogados).

Miro más abajo y veo que han desaprovechado la oportunidad de oro de solucionar el abuso de los bancos en los desahucios. Esto dice el anteproyecto:

«En ningún caso podrá el acreedor ejecutante adjudicarse los inmuebles por una cantidad inferior al 50% del valor por el que fueron tasados». Inferior al 50%, pero sí al 50%.

¿Y los políticos? Las durísimas medidas económicas, el estrangulamiento de nuestros derechos adquiridos, no han servido para crear empleo. Hugomabarca me apunta en twitter: han servido para que suba el IBEX, ayer lo hizo, hoy sigue por el mismo camino. ¿»Tranquilizan» los parados a los inquietos mercados? Los sumisos, sin duda.

Y, entretanto, nos están vendiendo el Estado en el mercadillo. Una vehemente y extraordinaria tribuna del catedrático Antón Costas, dice que, con las Cajas, estamos ante “El mayor desmán financiero de nuestra historia”. Traducidlo a todo lo público que están vendiendo y que, caso de dejar algo los socialistas, el PP terminará de liquidar. Desde el espacio aéreo que les han colado a los indignados y sufridos veraneanetes fastidiados por los controladores, a RENFE y transportes públicos que figuran en el punto de mira del PP, si antes no se les adelanta el PSOE.

Así empieza Costas:

“Tengo en el cuerpo la incómoda sensación de que estamos a punto de cometer el mayor desmán financiero de nuestra historia: la entrega de la mitad, ¡la mitad!, del sistema financiero español, a precios de saldo y desguace, a bancos, inversores privados y «fondos buitres», como les llama un conocido y reputado analista financiero, José Carlos Díez, en su blog».

Ayer unos cuantos salieron a la calle a protestar por el pensionazo. Las teles nos mostrarán hoy a “los violentos jóvenes radicales antisistema» Solo. Cometieron varios delitos, sobre todo éstos: ser radicales, antisistema y jóvenes, ése el peor. La “gente de bien” se asustará que es el objetivo. Pero lo que pasó de verdad, mayoritaramente, fue esto:

Copépodo nos relata la experiencia de convertirse en un «violento antisistema» que vivió ayer. «Yo y el jubileta que tengo al lado, y la señora con una niña (que probablemente sólo pasaba por allí) y se apretuja en un portal. ¡Somos violentos antisistema!» Solo que muestra las técnicas policiales ya ensayadas en Londres, por ejemplo.

¿Será eso lo que nos muestre la tele? Y con lo feo que está criticar y protestar. Es que, como dice el propio hugomabarca, «nunca nos mean a gusto de todos».

http://www.youtube.com/watch?v=bVbk5zeeGYw

Este largo post es porque me voy unos dias e igual escribo menos o nada. Así que hasta añado encuesta. Admite varias selecciones.

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