¿Existe la libertad de información?

Hoy es el día internacional de la libertad de prensa, tan vinculada a la libertad de información y de expresión. Las principales referencias a la efeméride, a la exigencia, las encuentro en periódicos latinoamericanos. México se queja de sus 61 periodistas asesinados en la última década, de los límites que sufren.También se preocupan en Colombia, Honduras, Venezuela. En Cuba, ni pueden abrir la boca.

El primer mundo, al que pertenecemos, apenas ve amenazas a la libertad de prensa, o no de ese calibre. El informe anual de Reporteros sin Fronteras nos presenta el mapa de sus 40 “predadores” mundiales. España está en al lista por ETA que, es junto a la mafia italiana, la única organización europea reseñada en tan amargo capítulo.

Ahora bien ¿gozamos de libertad de información? La búsqueda del beneficio máximo a cualquier precio, ha abaratado los costes del periodismo. Cada vez menos inversión, cada más copia y pega en lugar de elaboración propia. Y cada vez sueldos más precarios y más despidos. ¿Sirven, con esos condicionantes, la mejor información?

El periodismo, como todo, sufre de la sobreabundancia de oferta. Son tantos los medios que quien ha de responder, no parece disponer de tiempo –o de ganas- para todos. En algunos acontecimientos importantes, la organización exige el establecimiento de un “pull”, un pequeño grupo que entra y sirve lo que ve a los demás. Lógicamente, no elige a la Gaceta de Bollullos del Condado, y mucho menos a casi nadie de Internet. La masificación resta poder al periodismo. Lo diluye. Y también la asunción de responsabilidades por las disfunciones que es de lo que se trata.

Noticias repetidas, seleccionadas con el criterio de la venta, en los grandes medios, para una sociedad cuya infantilización se busca premeditadamente para hacerla más manejable.

Y al otro lado la gran esperanza blanca: Internet. La veo cada vez más sumida en un gueto. Tan obsesionada por el medio y las formas que casi parece ignorar los contenidos. Inventa palabras: nube, tractor, para viejos conceptos, en la idea de expedir carné a los socios, excluyendo al resto. Incluso algunos altos representantes de la cosa, elevan su tiernos puñitos para despreciar a quien no conoce la jerga.

Salvo gloriosas excepciones -algunas de las cuales reseño a menudo en el blog-, se diría que a las nuevas generaciones de periodistas la objetividad y el compromiso en la información les parecen conceptos trasnochados y tópicos. Prefieren la “objetividad” y… el funcionariado. Pero ni unos ni otros tienen voz, audiencia, no la suficiente. Todo se cuece más arriba, como en cada parcela del mundo en el que vivimos. Y la libertad se coarta por el miedo, en forma de autocensura, incluso mental. El miedo a perder el puesto de trabajo, influencia, y, de alguna manera, el favor de los poderosos -que lo son y mucho-.

Leo con pasión estos días a José Vidal-Beneyto, a cuyo homenaje asistí hace unos días. Demócrata practicante, permanente crítico, siempre esperanzado, confiado en el criterio de la sociedad, la única que ya tiene la llave del cambio (en la que habrá de madurar con información y educación, añado, siguiendo también el contexto de Vidal-Beneyto). Aterrado por el triunfo de la desmemoria. La última palabra que escribió fue –nos dijo otro intelectual de gran talla, Federico Mayor Zaragoza- Camus. Por esto: “los desprecio porque pudiendo hacer tanto han hecho tan poco”. No sé por qué, me parece que todo guarda relación. Yo me voy a abrir la mañana del lunes, como Passolini.

 ABRO LA MAÑANA

Abro a la mañana de un blanco lunes

la ventana, y la calle indiferente

roba entre su luz y sus rumores

mi presencia infrecuente entre las hojas.

Este moverme… en días totalmente

fuera del tiempo que parecía consagrado

a mí, sin regresos ni paradas,

espacio lleno todo de mi estado,

casi prolongación de la existencia

mía, de mi calor, del cuerpo mío…

y se ha truncado… Estoy en otro tiempo,

un tiempo que dispone sus mañanas

en esta calle que yo miro, ignoto,

en esta gente fruto de otra historia.

Pier Paolo Passolini Italia, 1922 – 1975

 

Una voz menos: José Vidal-Beneyto

Creo que se ha nublado el sol, al menos durante unos instantes: ha muerto José Vidal-Beneyto. 80 años de vida plena –y espero que feliz-. Sociólogo, con una profunda preparación, tengo la sensación de que dedicó sus días a España, Europa, la democracia y la justicia. Fue un activo opositor al franquismo, participando en la Junta Democrática y en el llamado «Contubernio» -tiene delito llamarlo así- de Múnich, nos dice la Wikipedia… que ha tardado en actualizar su fallecimiento. La noticia apenas sale  más que en El País, periódico del que fue socio fundador con todo lo que este diario supuso en su día de hito en la información y la democracia para nosotros. Los datos para su necrológica figuran en los enlaces del propio periódico, o aquí, lo que yo quiero traer aquí es su pensamiento. Porque cada irrupción en los caros de obtener espacios de opinión masiva, era un acicate y un soplo de esperanza. Reseñé varios articulos suyos en el blog. Se ha ido uno de los nuestros, una voz imprescindible. Ved si no. Entresaco párrafos, pero cada palabra suya era para enmarcarla.

LAS DESVERGÜENZAS DEL CAPITALISMO

“Era difícil de imaginar desde tan razonables y esperanzadores inicios, que la generalización de la trampa y de la rapiña en los ámbitos económico y financiero llevase a un triunfo tan absoluto de la economía criminal. De manera decisiva ha contribuido a ese resultado la mitificación unánime del enriquecimiento como referencia única del éxito, la celebración de lo que Oskar Lafontaine ha llamado la Dictadura del Monetariado, y, sobre todo, la hegemonía sin alternativas del capitalismo de casino. Todo lo cual ha dotado de respetabilidad a las felonías capitalistas más innobles, a las prácticas empresariales más abyectas. No exagero, vean los nombres y las cifras….” (y aquí viene una amplia reseña)

“Los estragos y la desmoralización causados por estos pillajes desde las alturas, han venido acompañados por la incitación al fraude, resultante de la extraordinaria expansión del crédito, que al coincidir con el fuerte abaratamiento del costo del dinero, tenía que producir la deriva monetaria y los efectos perversos que ha conllevado. Pero, además, esa orgía financiera dispuso para su celebración de un abultado arsenal de instrumentos, producto de una brillante ingeniería financiera que los había elaborado y puesto en acción durante la última década. Motejados de tóxicos, por su capacidad disruptiva y malignizante, su circulación y uso aumentaron de día en día”.

“Y así se ha originado este descalabro mayúsculo que algunos veníamos anunciando/denunciando desde hace tiempo (Vid mis seis columnas en este diario El capitalismo contra el planeta, de febrero a marzo de 2007, las dos de Fondos-Buitre, del 7 y 13 de julio del mismo año, o últimamente Capitalismo sin limites y Noticias del caos). Descalabro que difícilmente podremos superar porque los planteamientos, las soluciones y los actores sigue siendo los mismos. Y para quienes lo duden, ahí está para probarlo la Declaración de la Cumbre de Washington, procedente del G-20, cuyo análisis ha hecho de manera tan brillante como esclarecedora el Comunicado de ATTAC España del miércoles pasado. Por cierto ¿cómo es posible que ningún medio de comunicación español se haga nunca eco de los análisis de una de las organizaciones más consistentemente críticas y progresistas de nuestro país?

La mencionada Declaración es un estricto «más de lo mismo». Convocada por y celebrada en los EE UU; reservada a los grandes países excluyendo a más de un tercio de la población mundial; insistiendo en los salvíficos principios liberales de la fuerza salvadora de la libertad de comercio y de los mercados competitivos; reclamando un reforzamiento de las instituciones internacionales -OMC, FMI, Banco Mundial- responsables de la debacle, que son los que hay que sustituir cuanto antes; predicando una política monetaria de objetivo único, controlar la inflación, olvidando las necesidades de las clases modestas y de las PYMES; sin una sola propuesta efectiva para acabar con los paraísos fiscales; en definitiva, sepultando aún más los Objetivos del Milenio. Sólo una movilización popular e intelectual, insistida y de gran calado, podrá ayudarnos a acabar con tanta patraña y tantas desvergüenzas«.

LA ABOMINACIÓN QUE NO CESA

El patrimonio de los 10 más ricos del mundo es superior a la suma de las rentas nacionales de los 55 países más pobres. La sociedad debe cuestionar al capitalismo que glorifica la riqueza de unos pocos”.

Todo comenzó con el triunfo absoluto del yo en el universo de los valores y la emergencia de su soberanía en la sociedad con la exaltación absoluta del sujeto” (…) “Ahora, además, ideología y política se han sumado a esta estrategia, que ha hecho suya el liberalismo económico radical, una de cuyas formulaciones programáticas más populares son los Diez mandamientos para el éxito que nos propone Dany Robert-Dufour en su obra La Revolución cultural liberal, de los que pueden servir de muestra estos tres que traduzco del francés: “Tu única guía será el egoísmo“, “Violarás las leyes sin que consigan cogerte”, “Los otros serán sólo instrumentos para el logro de tus objetivos”.

Y luego no digamos que ese desafuero y todas las otras fechorías globales son inevitables como consecuencia de la situación mundial. El último informe anual de la ONU sobre Desarrollo de los Recursos Humanos desmonta una vez más el mito de que la pobreza global deriva necesariamente de un conjunto de circunstancias inmodificables por los escasos recursos disponibles frente a tanta población desasistida. Y de ahí la malnutrición, las cuantiosas enfermedades, la explotación y el crimen, el analfabetismo, la mortalidad infantil. Lacras que podrían eliminarse si se pusiera fin a un orden social, cuyo objetivo principal es aumentar la riqueza de los ricos. Conductas que aplaudimos con las dos manos. Porque ¿qué puede justificar que el patrimonio de las 10 primeras fortunas del mundo sea superior a la suma de las rentas nacionales de los 55 países más pobres? ¿Cuándo dejaremos de tolerar tanta ignominia, cuando pondremos fin a tanta abominación?»

   Escribía esto, llamaba a gritos a la reacción, desde una edad a la que otros se  sientan, no sé si enfermo, probablemente no: ha muerto de un fallo cardiaco. Un ejemplo de coherencia. Me ha entristecido la noticia, lo confieso. Sólo consuela pensar que su voz permanece y, si la amplificamos, tendrá eco, logrando muchas voces más. Para que otros lo vean, ya que él no ha podido hacerlo, recalco sus conclusiones:

Sólo una movilización popular e intelectual, insistida y de gran calado, podrá ayudarnos a acabar con tanta patraña y tantas desvergüenzas… ¿Cuándo dejaremos de tolerar tanta ignominia, cuando pondremos fin a tanta abominación?

Sus últimas tribunas en El País.

Lecturas recomendadas del día

Entre otras cosas, dice:

 «Súbanmelos para desarrollar la red gratuita de escuelas infantiles, levantar un sistema decente de atención para los mayores e invertir lo necesario para combatir las enfermedades degenerativas. Súbanmelos, para que los parados cobren una prestación digna y no esa limosna populista de los 420 euros. Súbanmelos, y creen un parque de vivienda pública accesible en lugar de avalar a los constructores y proteger las viviendas que no pueden vender.

Súbanme los impuestos, pero dejen de aprobar ERE mientras regalan nuestro dinero a las multinacionales del automóvil. Háganlo, pero acaben con los contratos basura y olvídense de «flexibilizar» el despido (lo que el PP llama «reformas estructurales»). Claro que, antes, no estaría mal recuperar el impuesto de patrimonio que ustedes derogaron (18.000 millones anuales), acabar con las asignaciones millonarias a la Iglesia y a la Casa del Rey y derogar la Ley 15/97, que permite privatizar la sanidad y que ustedes votaron».

«El origen de la actual crisis «empieza ya a olvidarse». «La culpa «parece que ahora la tienen los gobiernos». Pero la causa «está en una implosión del sistema financiero, que ha venido funcionando como un casino financiero mundial sin reglas».

«Estamos a punto de repetir el modelo que nos ha llevado a esta crisis. Estamos incubando la misma basura que nos ha llevado a esta crisis financiera».

«Se ha hecho un enorme esfuerzo para reflotar a los bancos de todo el mundo» y las entidades financieras «siguen vendiendo los mismos productos que antes, pero no dan crédito».

El pozo podría albergar el equivalente a cinco años de consumo en España.

Historia:

1981 Creación del INH (Institituo Nacional de Hidrocarburos): Organismo público creado con la intención de integrar las diferentes compañías que operaban en los sectores del petróleo y del gas en las que el Estado español tenía una participación mayoritaria o era el único propietario.

1986 Creación del grupo Repsol: Su accionista único es el INH. Repsol aglutina las compañías en las que el Estado Español tenía una participación mayoritaria, en las áreas de Exploración y Producción, Refino y Marketing, Química y Gas Natural Licuado (GNL).

1989 El Estado (INH) inicia la privatización de Repsol (Gobierno de Felipe González).  Con una Oferta Púplica de Venta del 26% del Capital de Repsol. Las acciones de Repsol, S.A. pasaron a cotizarse en las bolsas de España y en la de Nueva York.

1997 (Gobierno de José María Aznar): El Estado culmina el proceso de privatización de Repsol.

En consecuencia, esas ganancias podrían ser nuestras, de los ciudadanos.

 «El patrimonio de los 10 más ricos del mundo es superior a la suma de las rentas nacionales de los 55 países más pobres. La sociedad debe cuestionar al capitalismo que glorifica la riqueza de unos pocos».

» Todo comenzó con el triunfo absoluto del yo en el universo de los valores y la emergencia de su soberanía en la sociedad con la exaltación absoluta del sujeto» (…) «Ahora, además, ideología y política se han sumado a esta estrategia, que ha hecho suya el liberalismo económico radical, una de cuyas formulaciones programáticas más populares son los Diez mandamientos para el éxito que nos propone Dany Robert-Dufour en su obra La Revolución cultural liberal, de los que pueden servir de muestra estos tres que traduzco del francés: «Tu única guía será el egoísmo«, «Violarás las leyes sin que consigan cogerte», «Los otros serán sólo instrumentos para el logro de tus objetivos».

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