Una cuña para hacer palanca

Eneko.20 minutos

Eneko en 20 Minutos

La Europa ultra-azul teme seriamente que François Hollande, el candidato socialista francés, logre la presidencia de la república. Por ello se ha visto obligada a mover ficha. La propia “jefa” de facto en persona, Angela Merkel, se ha puesto a diseñar un “Plan de crecimiento” que estudiarán el resto de los países con toda la parafernalia que sea precisa para dar la impresión de que se está produciendo un cambio.

Este nuevo Plan Marshall –que incluso así de pomposamente empieza a anunciarse- es la perdiz que marean de vez en cuando (junto al establecimiento de la Tasa Tobin a las transacciones financieras) si algún elemento perturba la gran estafa a los ciudadanos que nos están perpetrando. ¿Queréis un poquito de crecimiento ante tanta austeridad? Venga, va, os damos una zanahoria para correr tras ella. De hecho, es tan “original” el Plan Merkel que rescata el Banco Europeo de Inversiones (BEI) –al que tienen depauperado- porque fue precisamente el instrumento que Hollande anunció para poner en marcha inversiones.

Saber lo que hay que hacer para crecer, saben. Por eso hablan de acometer proyectos de infraestructuras, energía y tecnología: el caramelo viene bien envuelto. Ahora bien, leo que piensan dotar al plan de la “astronómica” cifra de 200.000 millones de euros. Veamos, 700.000 dieron al primer fondo de rescate de los países hace justo dos años en el aciago día en el que doblegaron a Zapatero a su política neoliberal. 1,6 billones de euros a los bancos, dicho por Almunia, y ya llevan 1 billón más en líneas de crédito a un 1% de interés para que nuestras queridas entidades lo presten a los Estados que les dan el dinero al 5% ó 6% y cierren el grifo a los particulares, dado que les sale mucho más rentable especular en la burbuja de la deuda.

Por lo que veo lo que van a pedir a los gobiernos para inyectar al BEI son 10.000 millones entre todos, para pipas, con perdón. Pero barajan otras opciones para engrosar el presupuesto. Cuenta Claudi Pérez:

«En la próxima cumbre, tras las elecciones francesas, la Comisión presentará un menú de opciones que pasa por capitalizar el BEI o recurrir a la ingeniería financiera para acometer proyectos por importe de unos 200.000 millones a través de avales, eurobonos para financiar inversiones o todo tipo de vehículos financieros sofisticados, o incluso con la creación de una agencia europea de infraestructuras».

Es decir, de nuevo “ingeniería financiera” (o sea, aire financiero sin fondos reales), y sobre todo «la participación de la iniciativa privada» para que se aproveche de esos 200.000 millones de euros que alcanza el plan.

Con todo y cuando ya se está con el agua al cuello no es mala noticia. Las políticas de austeridad han sumido a Europa en el caos y están acabando en España con su ya de por sí precario Estado del Bienestar. Enlazo el análisis de Joaquín Estefanía “Creadores de escasez” por si lo queréis leer después con calma: “Dos años después del inicio de las políticas de austeridad extrema el panorama es desolador: Se multiplica el paro, la exclusión, las clases medias se empobrecen y mueren empresas”. Como repetimos hasta la extenuación aquí, “Las ayudas estatales al sistema financiero están en el epicentro de buena parte de los problemas de déficit y endeudamiento”. Y “Mientras los beneficios (de unos pocos) siguen siendo individuales, los riesgos (de la mayoría) se socializan”.

Veamos, en el más que probable caso de que Hollande gane, todavía no sabemos qué le permitirán hacer. A la España de Zapatero nada, dada su ruina propia. Francia es un país decisivo en la UE, pero a Obama tampoco le han dejado -con su mayor o menos colaboración- llevar a cabo sus intenciones de acabar o moderar esta estafa.

En España, tenemos al PP-Atila que, por convicción, no dejará en pie nada que beneficie el Estado del Bienestar, que corta, saja y privatiza con fruición, y que está dispuesto a emplear la máxima violencia para acabar con la contestación social. Y eso en “ausencia” de una oposición socialista que no da respuestas adecuadas (Aquí también es interesante leer después el análisis de Soledad Gallego-Díaz , «El presidente perplejo» sobre el panorama político español). Pero…

El “Efecto Hollande” ya ha hecho una muesca. Le temen y aún no ha ganado siquiera. Hay lugar para una cuña desde la que hacer palanca. Es la sociedad la que debe exigir sus derechos y parar esta locura. Si ya sueltan zanahorias, dejemos de ser liebres mecánicas. Constituimos una mayoría de seres humanos de carne y hueso, alma y cerebro (salvo los que reniegan de tal condición para seguir siendo monigotes) y, con las armas de la razón y de la no violencia, podemos hacer valer nuestro poder. Me temo que no hay otro remedio.