Añorando el 1.900

Me descubro desde hace un tiempo mirando con envidia las series “de época”. Les veo moverse en amplitud de espacios, sin la masificación que padecemos ahora capaz de amargar el más apetecible de los disfrutes. Viajar en tren, con calma, haciendo amistades entre los pasajeros. Despedirse previamente de familiares y amigos diciendo: “ya te escribiré”. Oh, eso es una maravilla, nada de agobios con el teléfono, los emails, la disponibilidad absoluta y los requerimientos acuciantes. Sin televisión, sin radio… con libros, con música. Con charlas ante una taza de café, muchas veces en un precioso jardín. Sin ruido.

Cierto que la ficción sobre aquellos tiempos nos presenta esa vida placentera para las clases adineradas, había grandes desequilibrios sociales. Pero al fin y al cabo estamos regresando exactamente a eso, sin ninguna de sus ventajas aparentemente.

Leo que en 1912, hace exactamente un siglo, salió una marcha de sufragistas en Nueva York. El 6 de Mayo fue. Los juegos olímpicos se celebraron en Suecia. Escribían Kafka, Antonio Machado o George Bernad Shaw. Lenz hacía estudios sobre genética y Rutherford andaba descubriendo el núcleo del átomo. En noviembre un anarquista se cargó a otro presidente progresista español: José Canalejas. Un intelectual sólido en sus ratos libres.

La Belle Epoque fue una época de progreso. Tras un período tranquilo sin liarse a tiros, Europa vivió un período muy fructífero que favoreció los avances científicos, técnicos, sociales y económicos. El capitalismo de entonces mermó los privilegios de la aristocracia. La producción en serie que propiciaría el bueno de Henry Ford lanzando el Ford T, extendió el disfrute de algunos bienes, de hecho él pensaba que hacía un coche para que lo compraran sus empleados. Buena la armó.

Ambiciosos y optimistas, alumbraron el positivismo (defendiendo la ciencia) y el cientifismo (que proclama que la ciencia lo explica todo). En España se animaban a ahuecar la caspa a ver si se deshacían de ella los regeneracionistas. Y no me negaréis que un tiempo marcado en el arte por el Expresionismo y el Art Decó no merece la pena.

Seguro que no fue un tiempo ideal, pero imagino a nuestros ancestros plagados de ilusiones. Menos en España donde los involucionistas de siempre andarían viendo cómo cortaban las alas de todo lo que se moviera. Lo cierto es que no pintaban mal aquellos tiempos como punto de partida hacia algo mejor. Recuerdo haber visto un documental norteamericano estupendo donde hablaban de que poco después la mujer empezó a representar en el cine una heroína que unía a la belleza, la inteligencia y la rebeldía. La Gran Depresión (debida también a los excesos del capitalismo) cortó en seco ese camino. Es decir, que aquellas primeras puntadas del Siglo XX realmente torcieron la dirección emprendida. Y sin embargo fue ese siglo el de los grandes descubrimientos. No sé hasta qué punto de… el progreso. Creo que sí, que también, pero derivando la senda hasta el caos actual.

Porque… ¿Qué está pasando entonces con el Siglo XXI? El gran fiasco, acabo de leer. Regresamos en los derechos sociales al despido libre, la arbitrariedad de sueldos y horarios. Los enormes desequilibrios sociales. La sanidad y la educación vuelven a ser, a grandes zancadas, solo para los ricos. Para aquellos que se despedían diciendo “ya te escribiré” en los andenes de un tren que caminaba con parsimonia permitiendo contemplar el paisaje y los propios pensamientos. 

Me sorprendo a mí misma añorando aquel tiempo que no viví. ¿Decadente? ¿Hay algo más decadente que la civilización actual? Siempre he amado el progreso, no miro atrás para lamerme las heridas, quizás para afianzar algún pie inestable, pero creo que esto no era lo lógico en un camino hacia delante. La masificación, la prisa, el control, el consumismo insaciable, los grandes espectáculos de multitudes muy multitudinarias. El abandono de la razón por creencias y supersticiones de una gran parte de la sociedad desorientada. El ruido, el inmenso ruido que tapa todos los sonidos, incluso -de no estar atentos- los interiores. La desinformación por saturación. Pincho una web y aparece cargado de chirriantes mensajes que encima no me cuentan la verdad, o no toda la verdad. Y así los hay a millones. La ilusión de hace un siglo, las apuestas por la ciencia y el conocimiento ¿dónde están?

Haber llegado a la edad madura viendo el apogeo del Jazz, en un club neoyorquino, con un maligno cigarrillo que no sé si hace tanto daño como la sinrazón. Por cierto, lo haré pronto, pero permitidme que me conceda el pequeño lujo de decir: “ya os escribiré”.

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13 comentarios

  1. Tiempo de desencanto, lo tenemos difícil, pero no lo debemos aceptar como derrota,que mas quisieran. NO TARDES, ESCRIBE PRONTO.

  2. WORDGALLARDETE

     /  24 marzo 2012

    Por favor,Rosa, ¡Escribe!.Te necesitamos
    Un abrazo

  3. anodadado

     /  25 marzo 2012

    Te comprendo perfectamente Rosa, que tranquilidad escribir con reposo y contando con el tiempo de llegada y respuesta de los mensajes, donde todo se meditaba mucho más… por otro lado hasta mediados del XIX la esperanza de vida estaba en Europa en torno a los 50 años (como hoy en el tercer mundo ese… (ironía) ), el cambio se produjo desde la invención de la penicilina y el conocimiento científico de las enfermedades… eso propició una evolución sin precedentes hasta ahora… creo que han decidido que ya no necesitan tanta humanidad longeva, ahora sólo útil mientras produce…. mientras las máquinas requieran de supervisión…. Poco a poco nos embrutecen, con saber leer las instrucciones les vale, luego es problema tuyo y de la familia tradicional (JOJOJO) gran modo de dominación, mansedumbre y control de la edad.
    Un sincero abrazo, y si el mensaje es literal y decides tomarte unas vacaciones… Te las mereces!

  4. Creo que la mayoría estamos por un nuevo progreso, muy diferente al sometimiento de un poder tan globalizado. Yo añadiría que tenemos que actuar y escribir forma parte de un compromiso personal hacia lo que no nos gusta y hacia donde no queremos ir. Necesito creer que no es tarde para reponernos de ese gran fiasco y que escribir puede aunar los refuerzos de una presión social ya en marcha. Me ha encantado tu artículo. Un abrazo

  5. julio

     /  25 marzo 2012

    La gran paradoja es que, pese a todo, cada vez estamos más informados y, por tanto, conocemos mejor la tremenda injusticia y estafa del ‘sistema’, pero sus beneficiarios cada vez están más chulos y más desafiantes.
    Me temo que eso es porque saben que están muy seguros…

  6. Trancos

     /  25 marzo 2012

    Triple Alianza. Triple Entente. Carrera Armamentista. Capitalismo en alza. Colonialismo salvaje. Imperialismo desbocado. Sólo unos años, mortalidad por miles en Europa por hambrunas. Sólo unos años después, mortalidad por miles en todo el mundo por la gripe. Sobre una población de unos 15 millones, una emigración media en España de unas 15.000 personas. Guerra chinojaponesa. guerra ruso japonesa. Los soviets afilando los cuchillos ante una situación social insostenible en la Madre Rusa. Es la época de «55 días en Pequin», y del «acorazado Potenski». Y de una prepotente Europa que basa su prosperidad (la de algunos, como siempre) en la explotación sistemática y despiadada de sus colonias repartidas por todo el mundo mientras nosotros perdemos Las últimas Colonias tras una guerra ruinosa contra los Estados Unidos (luego nos dedicamos a hacer el chorra con más frenesí en una guerra criminal en Marruecos), pesimismo nacional fuente del regeneracionismo. Periódicas y recurrentes epidemias de tifus, cólera, disentería, paludismo: la esperanza de vida de los españoles inferior a los 40 años … eso que me acuerde, así a botepronto. No, Rosa. Mis ancestros no viajaban en el Orient Espres ni en el Transiberiano, sino a lomos de mula vieja. Por eso, descansa, relájate, disfruta de la paz y del sosiego que te mereces pero, como diría Luis Aguilé, «camina, camina y no mires atrás, nu vuelvas la cara, no lo pienses más».
    Abzs.

  7. Ramón

     /  25 marzo 2012

    Al menos sabemos que blogs como éste, libros, presión, la gente en las calles, manifestaciones,…..Ese caldo de cultivo va calando. Hasta los que votan a la derecha acaban por entender que hay cosas que no se pueden tolerar. Los que mandan se ven obligados a cambiar algo, dejar salir un poco la presión: La ley de transparencia es un logro de toda esta presión. Sin ella no existiría. Alegrémonos, algo se consigue con la razón, con el boca a boca.
    La corrupción seguirá ahí, buscará nuevos requicios, pero lo tienen más difícil y hay que felicitarse por ello.
    Los poderosos tienen dos opciones: reformar el sistema para mejor o acabar con él. Esta ley es un síntoma de que, al menos, de momento, apuestan por reformarlo. Buena noticia.
    Otra cuestión importante: van a escuchar a quienes quieran aportar ideas a esa ley. Direis que harán oídos sordos, pero ya sienta un precedente. Esto también se ha conseguido desde esa misma presión. Sigamos adelante, como dice Trancos, sin mirar atrás y sabiendo ahora que se pueden conseguir muchas metas sin necesidad de ganar unas elecciones. Lo importante no es quien se apunta el tanto, lo importante es conseguir la meta.
    Por cierto, para que veais que la Ley de Transparencia parte de los movimientos sociales ahí va una muestra, esta propuesta en wikipartido en Octubre del año pasado, cuando el PP estaba en la oposición.

    http://wikipartido.es/index.php?title=Gobierno_transparente

  8. Jabalina

     /  25 marzo 2012

    Hola Rosa:
    Hace tiempo que te leo, sólo quería darte las gracias por el blog. No es extraño que me emocione leyéndote, que tus palabras se encuentren con mi sentido de la belleza y la justicia, saludándolos y enriqueciéndolos.
    Aunque el tiempo pase, lo importante es que tanto «ya te escribiré» como la emoción al leer las líneas prometidas siguen invariables pese al transcurrir del tiempo.

  9. Alecrin68

     /  25 marzo 2012

    Llegas a la madurez, no a la edad madura. A esta se llega cuando se deja de ser un joven con experiencia y se pasa a ser simplemente alguien con experiencia y años.
    Lo que entiendo reflejas en tu articulo es la necesidad que sientes (sentimos) de una menor aceleración de los acontecimientos y una mayor capacidad de reflexión y dominio sobre nuestra vida.Algo que por otra parte siempre ha sido mas una ilusión que una realidad.

  10. Qué bien escribes, Rosa, y con qué facilidad me haces entrar en tu mundo e instalrme allí con toda naturalidad y realidad.

    Disfruta estos días. Vendrás con un montón de informaciones y avances de los sucesos de esta pobre España.

    Besos.

  11. Rebelión

     /  26 marzo 2012

    Una élite muy pequeña de financieros y banqueros son los que en realidad gobiernan el mundo a través del timo de la deuda (ellos sólo tienen las planchas de los billetes,mientras nosotros somos los que ponemos el trabajo real y nuestro tiempo) y la admitida por parte de nuestros políticos usura bancaria.

    ¿Progreso?¿Desarrollo?…No…ESCLAVITUD!

  12. Rebelión

     /  26 marzo 2012

    Nota:Una cosa sí que era buena en el siglo XIX…no había ningún tintorro party penetrando en las casas.Lo que es alucinante es que gran parte de la clase trabajadora siga votando modelos económicos y políticos de la clase empresarial,burguesa y financiera.El tintorro party está ganando la guerra de desinformación,manipulación,insultos y mentiras.

    ¿Tintorro party?…No,gracias.
    Salud mental!

  13. Rebelión

     /  26 marzo 2012

    Otra cosa buenísima del siglo XIX:no existia ni Telemadrid,ni Canal Nou,ni la Castilla-La Mancha Tv del capitalista y derechista Nacho Villa.

    Perdonadme que insista hablando de los «medios de comunicación tradicionales»,pero es que creo que son una auténtica basura (a veces pagada con dinero público como es el caso de algunas televisiones autonómicas convertidas en descaradas teles de partido).
    Sí,quizá el siglo XIX no estaba tan mal…je,je.

    Un beso.

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