El director de El País, Javier Moreno, publica hoy un contundente análisis sobre el PP en Cuarta Página -el más destacado espacio editorial-. A modo de resumen, dice:
«La trama Gürtel muestra en toda su crudeza que el proyecto político de los actuales líderes de la derecha, de no mediar rectificación, embrutece la vida política española y la arrastra lejos de los niveles europeos».
Véamos algunos párrafos de un artículo que no tiene desperdicio:
«Todo ello comenzó mientras el señor Aznar, a la sazón presidente del Gobierno, casaba a su hija en El Escorial -sarao al que asistieron como invitados distinguidos algunos de estos vividores- y dirigía los destinos de España con tal concentración que descuidó lo que la corte de los milagros organizaba a sus espaldas, según pudieron descubrir atónitos los espectadores que el jueves pasado siguieran la entrevista en CNN+ de Iñaki Gabilondo con la señora Cospedal, hoy secretaria general de ese mismo partido. Sobre que el saqueo se prolongara unos años más en los feudos del PP de Madrid y Valencia quedamos de momento huérfanos de explicación. Nadie en el partido supo nada, ni es responsable de nada, ni asume naturalmente responsabilidad política alguna por nada.
(…)
Los ciudadanos consideran de forma mayoritaria -incluido un notable porcentaje de votantes del Partido Popular-, como publica hoy EL PAÍS, que Francisco Camps y Esperanza Aguirre son también responsables de las tropelías de la trama Gürtel en sus respectivos territorios, y que el líder del partido, Mariano Rajoy, siempre ha sabido más de las andanzas de los corruptos de lo que ha venido en reconocer, a tenor de sus vacilaciones con el ex tesorero del partido, y a día de hoy todavía miembro del Grupo Popular en el Senado, Luis Bárcenas.
Son tantas y tan obscenas las colecciones de relojes de lujo, los bolsos, los trajes, algún yate, los inconfesables negocios inmobiliarios, los millones cobrados en comisiones diversas y las vergonzosas conversaciones grabadas entre los sospechosos que convierten en irrisorios, me parece a mí, los intentos del PP y de sus terminales mediáticas de encapsular al partido de tanto desafuero, y sobre ello no vale la pena seguir discutiendo. Más me interesa, por el contrario, una reflexión en profundidad sobre la venalidad en la democracia española que vaya más allá de la constatación más o menos impotente del lamentable estado en que se encuentra la política en este país. Hay que defender la democracia, sostiene Norberto Bobbio, aun cuando ésta sea ineficiente o corrupta. Y hay que hacerlo también, me atrevería a añadir yo, aun cuando la insensatez y la escasa cultura democrática de gran parte de la clase política, especialmente de una derecha que no logra incorporarse del todo a la gran tradición conservadora del resto de Europa, augure un triste futuro a la tarea.
(…)
No resulta necesaria harta sagacidad para concluir que España no sólo no ha logrado en estas tres décadas situarse al nivel de los países con mejores prácticas, ni por lo que respecta a los partidos ni a los tribunales, sino que ahora se corre serio riesgo de descender aún más peldaños en esta particular escalera al infierno si, como todos los sondeos parecen apuntar, la derecha gana las próximas elecciones sin haber purgado previamente su papel central en el escándalo de Gürtel y otros (Matas, Fabra), y asumido las consecuencias que de ello se derivan.
(…)
Por lo demás, y en lo que respecta a la corrupción, no creo que a estas alturas quepa duda alguna de que un eventual triunfo de la derecha traerá como correlato automático el discurso que ya hemos oído en su versión más arrabalera e iletrada en los mítines de Camps, Fabra o la siempre desaforada Rita Barberá. Los votos cosechados, han dicho todos ellos de una forma u otra, expían los abusos cometidos, y el pueblo, el mejor tribunal en última instancia, les absuelve así de los cargos que de forma atrabiliaria les atribuyeron jueces prevaricadores, fiscales partidistas y una policía manejada a su antojo por un Gobierno socialista constituido en régimen y decidido a liquidar la oposición. Para lograr sus objetivos, los socialistas no paran en mientes, según han afirmado tanto la señora Cospedal como el señor Cascos, vicepresidente con Aznar, respaldados de forma oficial por el partido este mismo viernes. Y así los españoles han tenido que escuchar de dirigentes cuyas declaraciones no toleraría ningún partido democrático en Europa cómo los policías trucan las pruebas del sumario o el Ministerio del Interior monta un sistema de escuchas ilegales contra la oposición política.
El que resulte estrambótica no convierte esta hez en menos peligrosa, y convendría no menospreciar su capacidad de desestabilización. La campaña que orquestaron los dirigentes populares contra Baltasar Garzón desde el mismo fin de semana que el juez encarceló al cabecilla de la trama tiene mucho que ver con el irrespirable clima que se ha creado en los tribunales españoles, sectarios y cargados de ideología, en los que el magistrado puede ver liquidada su carrera ante el asombro del resto del mundo».
Resulta reconfortante ver defendida en un decisivo periódico la impresión que casi cada día tratamos de hacer llegar -desde posiciones modestas- a la ciudadanía, para que -con la información (argumentada y analizada)- disponga de medios para ser más responsable y más libre, para que -informados- todos lo seamos.
Actualización
Más. Una columna de Antonio Orejudo en Público: La culpa de la corrupción la tienes tú.
Tú coges a un militante del PP de Valencia y le robas la cartera con el dinero que acaba de sacar del cajero automático, y el tío te persigue hasta que te pilla. Lógico. A la gente no le gusta que le roben. Lo que me parece raro es lo contrario, que pilles a un caco desvalijándote la casa y que en vez retorcerle el brazo, pienses que hay una conspiración contra el que te está levantando el televisor de plasma, y que el verdadero culpable eres tú. Eso es más o menos lo que pasa con la corrupción política: nos roban y nos quedamos tan campantes. Nos quedamos tan campantes los que somos normales. Los anormales van un paso más allá y defienden al ladrón de su dinero…. (continúa leyendo).
Y un maestro: Forges.
El burro de Goya
/ 11 abril 2010Pues sí, alguna ventaja tenía que tener el bipartidismo. Cuando lo de Filesa, el Gal, etc. y muchos etcéteras más resulta que el País no daba este ejemplo de democracia ligada al Estado de derecho citando a Bobbio. Entonces ni citaban a Bobbio, ni apenas citaban caso alguno de corrupción! No había que hacer caso del amarillismo de El Mundo, así que casi normal que ahora Cascos salga por las mismas peteneras. A fin de cuentas se trata de un político que defiende a los suyos, pero tratándose del periódico de referencia, ¿a qué se debe su antes y su hoy?
rosa maría artal
/ 11 abril 2010Mira, estoy hasta el moño del «y tú más» o «y tú también». Vivimos tiempos muy duros para no dedicarnos a arrimar el hombro todos en busca de soluciones y corrigiendo los graves desvíos que nos alejan de la democracia en España, y de un mundo justo de polo a polo.
Maripuchi
/ 11 abril 2010No creo que la salida de Cascos (aka El Doberman) del armario en esta semana haya sido casual…
apajerabierta
/ 11 abril 2010La actitud de los dirigentes del PP hace pensar que el partido está pringado hasta las orejas.
Se tendría que buscar la forma de que cuando altos cargos de un partido están implicados en este tipo de asuntos, el partido tuviera una responasibilidad subsidiaria. Pero por razones obvias el parlamento nunca votará una ley que perjudique a los partidos que lo componen.
Las declaraciones de Cascos, sin presentar pruebas, me parecen inadmasibles.¿No se pueden tomar medidas legales contra él en caso de que no aporte pruebas?
Otro tema que no entiendo. Según la Constitución, todos los españoles somos iguales ante la ley. El aforamiento de los parlamentarios, ¿no es anticonstitucional?
En este país de pillicos y del «y tú más» no creo que el PP pierda ni una décima de punto de intención de voto. Estoy empezando a pensar que en España, el que no es corrupto, es porque no ha tenido oprtunidad de serlo y todos estos personajes vomitivos son mirados con una cierta admiración y sana envidia por muchos conciudadanos. Por lo visto los hechos no son moralmente clalificables «per se», si no en función de quien los cometa. Conozco a bastantes votantes del PP que ante la situación del partido guardan un «prudente silencio», como si no pasara nada. Me gustaría oirlos si la corrupción hubiera sido descubierta en el PSOE.Otro ejemplo: los que se oponen ruidosamente al aborto guardan un «caritativo» silencio ante los casos de pederastia en la Iglesia Católica.
La degradación de una sociedad, no depende de la mayor o menor cantidad de m… que exista, si no cuando nos gusta la m…
RBlanco
/ 11 abril 2010Los casos de corrupción del PSOE, de los que fueron condenados tres, sino me equivoco, pero parecían mil, fueron juzgados y condenados -incluso un ministro y un secretario de Estado-. Y cómo socialista me parece muy bien que en cualquier partido, el que sea, el que la hace debe pagarla.
Fue el juez Garzón, el que instruyó los casos del PSOE y entonces el PP, lo aplaudía a rabiar porque de lo que se trataba, más que de perseguir la corrupción, el Gal, etc, era echar al González del poder, porque se creían incapaces de ganarle a Felipe en unas elecciones. Esto fue reconocido por Luis Mª Anson en su día http://es.wikipedia.org/wiki/Luis_Mar%C3%ADa_Anson.
Eso es cosa del pasado que ya ha sido juzgado, los culpables han pagado por lo que hicieron y otros sin haber hecho nada.
Ahora la corrupción alcanza el PP, que ya estaba tocado antes de llegar Aznar -que alcanzó la presidencia de Castilla-León. por el mismo camino que con González, acusando de corrupción a Demetrio Madrid del que luego se demostró su inocencia-, con el caso Naseiro y otros.
Hoy, como siempre, para el PP, se les persigue, nunca son culpables de nada y en lugar de regenerar su partido que es lo que necesita España: Un partido de derechas verdaderamente democrático y no esta derecha ultramontana y corrupta que tenemos a día de hoy.
España, la sociedad española no merece difamadores, corruptos, injuriadores ni trepadores profesionales
RBlanco
/ 11 abril 2010Aparejabierta: Si bien la Constitución dice que todos somos iguales ante la ley, no recuerdo en que título, pero dice que los cargos electos son aforados y solo pueden ser jugados por el Tribual Supremo -igual que los jueces-. Cuando digo cargos electos me refiero a senadores, diputados y creo que también son aforados los diputados de las autonomías.
Es decir, para ser juzgados, tienen que serlo por flagrante delito, y pedir al Congreso o las Cortes -que no recuerdo bien- su desaforo. Sino no se puede.
En el caso de Álvarez Cascos, que creo que no tiene ningún cargo político sí podría ser procesado por injurias.
El burro de Goya
/ 11 abril 2010No veo por donde deduces de mi comentario que yo defienda el «pues tu más». En tu post te limitas a reproducir fragmentos de un editorial, del que recomiendas su total lectura y ensalzas. A falta de más comentarios te sugería un poco de contextualización y memoria: «alguna ventaja tenía que tener el bipartidismo». En lo cual me ratifico. Saludo sus efectos benéficos (como en su día fue la aportación de El Mundo a la salida del PSOE), y aprovechemos, bien, su gran influencia. Pero al menos ironicemos un tanto sobre estos salvadores alternos del sistema que sólo arengan pro domo sua. Ellos no arriman el hombro, ¡sino el ascua a su sardina!
max
/ 11 abril 2010Eso mismo paso en Madrid,le robaron 2 diputados al PSOE y los madrileños en vez de castigar al ladron le premio dandole la mayoria absoluta.
Soto
/ 11 abril 2010Hola Rosa Maria y amigos Contertulios:
El Burro de Goya,me dirijo a ti con el maximo de los respetos;queria matizarte en pos de la objetividad que «tirando de Hemeroteca» del Diario el Pais,(lo digo sin mirar la Hemeroteca,pues me recuerdo perfectamente) que la información del Pais y la Cadena Ser cuando fué el Gal y los casos de corrupción, la información ,repito,fué de la maxima objetividad ,te invito amablemente a que lo compruevo;el periodico el Pais con el Gal fué el primero ,tiempo antes de estallar el escandalo,en decirlo y criticar(Juan Luis Cebrian) muy duramente el trabajo de Barrionuevo como Ministro del Interior.Repito ,con la maxima amabilidad te animo a que lo compruebes.
Ahhh..y no hubo periodista tan duro (tecnicamente hablando) que Iñaqui Gabilondo cuando en la famosa entrevista a Felipe Gonzalez ,le preguntó reiteradamente si el era el responsable del Gal,fué una entrevista en la que puso entre las cuerdas al Presidente de Gobierno.
Apertas agarimosas
Juasssss
/ 11 abril 2010max: perdóname, lo de Aguirre fue de traca (y probablemente delictivo), pero lo del PSOE también. A Simancas se le tendría que caer la cara de vergüenza por no haber dimitido después de la que le colaron, pero no lo hizo.. fíjate, ha acabado con premio y todo, él y su puta playstation rota: primero de diputado (por irse sin montarla), aprovechando para tocar las narices con su absoluto desconocimiento del tema P2P, y luego la típica patada hacia arriba, al senado.
Muchos nos quedamos la segunda vez en casa o hicimos voto inútil. ¿Aguirre?. No. ¿Simancas?. Tampoco, gracias. Sobra tanta gente en los dos grandes partidos que si echáramos salfumán iban a quedar 10 y gracias.
Y el ex de Parla nos ha salido cojonudo también. Los del PSM son más masoquistas que los atléticos, y lo peor es que los madrileños somos los que sufrimos las consecuencias.
Ani Lopez
/ 12 abril 2010La derecha siempre ha sido más descarada para estas cosas y la izquierda cuando lo ha intentado mucho más chapucera, cosa de valores diría pero en efecto, ya basta del «y tu más».
¿Castigarán las urnas a los corruptos? decía El Periódico de Catalunya hoy, con que los castigara severamente la justicia (a todos, sin distinciones) ya me podría yo más contento que unas pascuas.
Ramon
/ 12 abril 2010No se trata de solucionar las cosas con un «y tu más», pero creer que la derecha española es más proclive a la corrupción que la izquierda (o al revés), es de ciegos… o de ciegamente partidistas.
Somos un país de corruptos en el que las ideologías políticas son lo de menos. Orejudo lo expresa muy bien en la columna que nos cita Rosa María: «…los electores no penalizamos a los partidos envueltos en escándalos como la Gürtel, porque todos haríamos lo mismo en circunstancias similares». Si, el caso Gurtel es de lo más llamativo y escandaloso, pero ¿no os olvidáis de los varios cientos de cargos del PSOE actualmente imputados por diversos actos de corrupción? ¿es que nadie se acuerda ya de la corrupción y del amiguismo de los gobiernos de Felipe Gonzalez? ¿Nadie se acuerda de que los socialistas se veían a sí mismo como dioses, por encima del bien y del mal, como demuestran los asesinatos del GAL? No nos engañemos: aquí estamos hechos todos de la misma pasta. «Dios mío, ponme donde haya, que ya me encargaré yo de cogerlo», dice la típica oración hispana. El que no «coge» es porque no puede… o porque no es buen español.
Hace un año nos dimos cuenta de que no eramos ricos, sino pobres. Ahora nos empezamos a dar cuenta de que no somos demócratas, sino caciques y siervos. De que no hubo transición, sino encubrimiento. De que, en lugar de justicia y honradez, nosotros funcionamos en base a favores y picaresca. Bueno, por algo se empieza. Darse cuenta de que los problemas existen es el primer paso para darles solución.
Pati_Difusa
/ 12 abril 2010Burro de Goya: Equidistán, Equidistán… pero distan e, independientemente de eso, lo de Gürtel hiede punto.
Aunque el gesto sea calificado como de «audacia» de Aguirre en un titular de Público, a mí el magín y los escrúpulos me ponen difícil el eufemismo o la búsqueda de término más políticamente correcto y me quedo con la cara dura de la señora presidenta de la Comunidad de Madrid haciendo esas declaraciones en las que decía que la trama corrupta que afecta a su partido la había destapado ella al evitar la venta de unas parcelas en Majadahonda.
El dato aportado por Aguirre nos deja helados porque no se refleja en el copioso sumario -Majadahonda es uno de los municipios madrileños más esquilmados por los avispados de la Gürtel- y porque, además, en el mencionado sumario, sólo hay información de instituciones y organismos ofciales del gobierno madrileño del PP en el lado del debe: presunta financiación ilegal de las campañas electorales del partido (aquella del tamayazo, suceso con olor a pucherazo, qué edificante) a través de Fundescán, presidida por la misma Aguirre hasta hace poquito.
La cosa tendría gracia -que hubiera sigo Aguirre la descubridora de la trama- porque desde que el asunto Gürtel salió en los periódicos, ella se ha quejado de persecución al PP, acoso al PP, falsedades contra el PP y conspiranoias similares a la esgrimida por Cascos hace unos días o por Cospedal en diversas ocasiones. Pero es que este caso, el de las parcelas de Majadahonda, ha hecho menguar las patitas de la presidenta porque la tozudez de los hechos califican la rajada como falacia pues:
A) Según hemos sabido, la Comunidad de Madrid, con la firma del vicepresidente González y mano derecha de la presidenta, sí autorizó la mencionada venta a una empresa filial de Correa
B) Las razones por las que la venta no se acabó produciendo son totalmente ajenas a las gestiones y acciones de la Comunidad de Madrid y más tienen que ver con Garganta Profunda, José Luis Peñas y con las denuncias otros grupos políticos.
Pati_Difusa
/ 12 abril 2010Donde dije digo, digo Fundescam, que Fundescán es un invento mío
el burro de Goya
/ 12 abril 2010Amigo Soto, dices:
«…que “tirando de Hemeroteca” del Diario el Pais,(lo digo sin mirar la Hemeroteca,pues me recuerdo perfectamente) que la información del Pais y la Cadena Ser cuando fué el Gal y los casos de corrupción, la información ,repito,fué de la maxima objetividad ,te invito amablemente a que lo compruevo;el periodico el Pais con el Gal fué el primero….»
Amablemente y también con todo los respetos sólo te puedo decir que involuntariamente has hecho un mal chiste. Repasa por favor las hemerotecas, ya vemos 8gracias por tu ejemplo) lo fiable qu en este país es la memoria. Y me demuestras que mi comentario no estabas de más. Pido otro esfuerzo a los corifeos: Ya aclaré en mi anterior respuesta a la señora Artal, que yo no iba en absoluto, por aquello de «Anda, pues mira que tú». Estoy con Ramón cuando avisa del peligro de los partidismo. ¿Que han hecho hace poco PP y PSOE con la reforma de la Ley Electoral? ¡Pucherazo! Pues mientras la conclusión sea que la derecha es más inmoral y la supuesta izquierda sólo torpe apañados vamos…
Ani Lopez
/ 12 abril 2010Ramón, yo no he dicho ‘más proclive’, he dicho ‘descarada’ por que no me refiero a la cantidad sino a las maneras.
Ramon
/ 12 abril 2010Ani Lopez, no te contestaba a tí ni a nadie en particular. Es que me había parecido que en los comentarios había un cierto ambiente, en general, de que «la corrupción es cosa de la derecha». Por desgracia, la corrupción es cosa de los españoles.
Soto
/ 12 abril 2010El Burro de Goya:
Con respeto y la cortesia muy usual en este Blog te digo(repito ,con cortesia) que lo que transcribo de tu primer comentario no concuerda con la realidad,el Diario el Pais fué objetivo y realista con la corrupcción del PSOE,el Diario el Mundo no niego que dijo cosas ciertas pero con la «saña y veneno de su Director» una mezcla de realidad y exageración y manipulacción. ¿Te parece objetivo el diario el Mundo?.¿Te parece buen periodismo el de este diario?
Apertas agarimosos
El burro de Goya
/ 12 abril 2010Bueno, pues debo aclarar que tampoco defiendo a El Mundo. Recordar lo que un medio hizo y lo que el otro no hizo por lo visto es también tomar partido por uno de ellos. ¿Apañados vamos! Tanto que sólo vemos y recordamos lo que queremos: así nos va.
Soto
/ 12 abril 2010(«Tanto que sólo vemos y recordamos lo que queremos: así nos va.»).
Gratuita reflexión,por lo tanto doy por zanjado el tema.
Un Saludo
Ani Lopez
/ 13 abril 2010Disculpa Ramón, al ir tu comentario detrás del mío pensé que era al respecto.
En cualquier caso la corrupción no es patrimonio de ningún partido y lo es de todos, generalizar así tal cual es tontería, igual que es bobada decir «la corrupción es cosa de los españoles».