Empresario de Gandia (Valencia). Una panificadora industrial. Franns Rilles Melgar, boliviano de 33 años lleva trabajando dos años, durante 12 horas diarias, por un sueldo de 23 euros al día, sin contrato laboral. La máquina de amasar le siega el brazo izquierdo. El empresario lo tira a la basura. Limpia la sangre. Sigue la producción. Lleva en su coche al accidentado a 200 metros de un hospital y se va. Un peatón le socorre y le acompaña hasta el centro.
Los médicos que le atienden van a la fábrica intentando recuperan el brazo y reimplantarlo, pero está tan destrozado que no es posible. El enfermo ingresa en la UVI.
La denuncia es de CCOO que ha interpuesto demanda en el Juzgado acusando al empresario de varios delitos. El empresario niega parcialmente los hechos y dice que fue la culpa de su trabajador que «iba borracho». Y sólo se lamenta de que tendrá que indemnizarle.
Una rosa en mi jardín
/ 10 junio 2009Y este empresario valenciano, a este «ciudadano ejemplar», con permiso Camps ¿A quien o qué partido creen que vota? Adivina, adivinanza.
Guti
/ 11 junio 2009¡A ver, a ver! Que me encantan las adivinanzas.
Yo diría que la respuesta a esa adivinanza es…
¿Prejuicio?
josé ángel madrid
/ 11 junio 2009Y digo yo, ¿por qué no ha salido a relucir el nombre del empresario o de la panificadora? ¿qué miedo hay?
rosa maría artal
/ 11 junio 2009En la información de Levante, sí viene el nombre de la panificadora, pero no del empresario:
Panificadora del Real de Gandia
rosa maría artal
/ 11 junio 2009No, Real de Gandia parece un barrio y hay una docena de panificadoras.