8 comentarios

1. 

   camino a gaia

    /  30 septiembre 2010

   Los parásitos reaccionan mal cuando ven peligrar sus privilegios.
   Las fuerzas armadas, las fuerzas de orden público, son los que defienden los intereses privados.

2. 

   ipon

    /  1 octubre 2010

   Parece ser que finalmente no han podido hacerse con el poder. Malos tiempos nos va a tocar vivir; hay solo un modelo de Estado y una corriente ideologica valida. Quien no pase por el aro que se atenga a las consecuencias. Lei hace poco que ante la caida del comunismo toda la propaganda buenista del capitalismo ha ido disolviendose como una azucarillo. No hay necesidad de mostrar virtudes porque no hay competidor. El invento del estado del bienestar ya ha cumplido su cometido. Lo siguiente es la dictadura de capitalismo.

3. 

   corazon rojo

    /  1 octubre 2010

   Tienes razón ipon, no recuerdo donde leí que «todo lo que nos contaron del comunismo era mentira, pero todo lo que nos contaron del capital, era verdad». Rosa seguro que sabe quién fué el autor.
   Salu y Republica!

4. 

   corazon rojo

    /  1 octubre 2010

   …del capitalismo.

   Salud y Republica!

5. 

   Galgo de Casalarreina

    /  1 octubre 2010

   Penoso que los gendarmes de la explotación, los carapintadas y demás gentuza, sigan copiando el modelo español del XIX, el cuartelazo o el pronunciamiento.
   Pena me dan los soldados rasos, obligados por los mandos a salir a la calle, contra su propia gente, contra sus vecinos.
   Todavía me acuerdo del 23F.

6. 

   eliecer

    /  1 octubre 2010

   Demasiadas veces las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado sólo sirven para traicionar a la gente que les entrega las armas para que los defienda. Da asco, y al final seguro que no pasa nada con los culpables, como aqui el 23-F, que ya están todos libres y cobrando pensión, si hubieran triunfado, no obstante, los democratas estarían criando malvas, y sus familias machacadas y vejadas sin piedad.
   Saludos.

7. 

   Jose

    /  1 octubre 2010

   Resulta asquerosa la recurrencia de los «derechones» latinoamericanos a intentar cambiar a hostias lo que las urnas han dibujado. Ya nadie se acuerda de Honduras, cuyo presidente actual fue elegido gracias a la maestría de otro golpe militar que apeó a quien molestaba. Y nosotros, los occidentales pichi-guays seguimos silbando el pa-pan-panamericano…

8. 

   pandugar

    /  2 octubre 2010

   Las imágenes y reportajes sobre las protestas policiales han sido muy elocuentes.Dan realmente idea de la fragilidad de la Democracia…
   En estos momentos,cualquier presidente del continente americano debe ser muy prudente,realizar las reformas que lleve en su programa,pero con escrupuloso respeto a la ley.Además debe tener un ojo puesto en qué opina la sra.Clinton por un lado y qué opina el señor Chávez,con el otro.Se corre el grave riesgo de acabar estrábico,pero no hacerlo es mucho peor.Si irritas a los Estados Unidos,más tarde o más temprano lo pagarás caro,su apoyo es esencial en todo.Si irritas a Chávez,a Cuba y demás se te tilda de poco respetuoso con los más débiles y poco «revolucionario».Correa parecía pretender realizar todo tipo de reformas ,pero siguiendo su propio ritmo,con razonable respeto a la oposición y buena vecindad con Colombia,y Perú que no son de su cuerda ideológica.Recibiendo las muestras de solidaridad de Venezuela y Bolivia que le «espolean» a ir más rápido en las reformas. Le ha salvado el gremialismo.Si en lugar de reformar aspectos de la policía (económicos y honoríficos) por separado,se llega a meter también con el Ejército podría haber acabado peor que Zelaya, en Honduras el pasado año…Un saludo.