
No sé si es la hora del planeta o de algún otro interés -incluído el nuclear- o que nada puede hacerse sin patrocinadores y estrellas de medio pelo o pelo largo que atraigan a la causa, pero hay varias cosas que parecen sugerentes en el invento. Acción ciudadana al unísono, pasar una hora con velas y conversando, sin ruidos, y restar algún beneficio a las eléctricas. En nuestro caso, al gobierno italiano de Berlusconi que controla la antaño española Endesa. De 20,30 a 21,30. Desconexión total de la red. El reloj de los aparatos electrónicos hay que adaptarlo de todos modos por el cambio de hora. Para más detalles lo más interersante que he encontrado está en soitu. ¡Feliz oscuridad!
Actualización 22,30. Un 1% de los españoles ha secundado el llamamiento, según datos de Red Eléctrica Española. En cambio, sí lo ha hecho la sexta parte de la población mundial. Premio a la concienciación para los españoles.
Ya lo he advertido por la ventana. Pocas luces apagadas, pocas que se han encendido a las 21,3o, porque hubieran apagado por esa causa. Agradable pausa con velas y conversación, pero sí he notado una fuerte dependencia de la electricidad. Hay muchas cosas que creemos necesitar que dependen de un enchufe o un interruptor.





